Introducción
Esta sección presenta una serie de prácticas y tecnologías de agricultura sostenible adaptada al clima (ASAC) desde de varios puntos de entrada: manejo del suelo, manejo del cultivo, manejo del agua, manejo del ganado, silvicultura, pesca y acuicultura y manejo energético. En general, se considera que prácticas son las maneras de llevar a cabo las labores, por ejemplo, agricultura de precisión, labranza y fertilización, todas ellas son prácticas de ASAC. Las tecnologías son nuevos materiales introducidos en las nuevas o antiguas prácticas y pueden incluir nuevas variedades tolerantes a la sequía, una raza más resistente de ganado o un nuevo fertilizante de liberación lenta. Muchos de los puntos de entrada suponen intervenciones a nivel de finca. Sin embargo, en muchas ocasiones, también es necesario tener en cuenta el manejo de recursos naturales a nivel de paisaje (ver enfoques sistémicos de la ASAC). En la mayoría de casos habrá una conexión inevitable y deseable entre puntos de entrada.
Manejo de suelos
Introducción
Mantener o mejorar la salud del suelo es esencial para una agricultura sostenible y productiva. Un suelo ‘saludable’ ayudará a impulsar la producción agrícola sostenible cerca del límite máximo posible, de acuerdo con el tipo de suelo y el clima. Los aspectos clave de un suelo ‘saludable’ incluyen lo siguiente:
- Una cobertura vegetal extensa.
- Niveles de carbono en suelo cercanos al límite, de acuerdo con el tipo de suelo y el clima.
- Pérdida mínima de nutrientes del suelo por lixiviación.
- Índices mínimos o nulos de escorrentía y erosión del suelo.
- Ninguna acumulación de contaminantes en el suelo.
- Agricultura que no dependa excesivamente de energía fósil por el uso de fertilizantes químicos.
En muchas regiones del mundo, la salud del suelo se ve seriamente amenazada por los incrementos en población humana y de ganado. Esto ha causado la intensificación del cultivo de la tierra en áreas con alto potencial, la expansión agropecuaria hacia los bosques y ambientes marginales con suelos frágiles, así como la sobrepoblación de ganado y pastoreo excesivo en pastizales naturales. Por lo que, en combinación con las dificultades que enfrentan los pequeños agricultores respecto a la disponibilidad de insumos nutritivos orgánicos y químicos, estos factores han provocado el deterioro de la salud del suelo a gran escala y, así, de la productividad en esas regiones.
Su contribución a la ASAC
Las mejoras en el manejo del suelo recuperan la salud del suelo y contribuyen a la ASAC desde varias perspectivas importantes:
- Productividad: Todas las intervenciones que mejoren la fertilidad del suelo, la disponibilidad del agua en el suelo y reduzcan la pérdida de la capa superior del suelo, rica en nutrientes, mejorarán directamente la productividad.
- Adaptación: En varias partes del mundo, los fenómenos pluviales intensos ya son un hecho común y son un gran riesgo para la escorrentía y erosión del suelo, especialmente en laderas. Las proyecciones de cambio climático sugieren que es muy probable que la frecuencia y severidad de dichos fenómenos aumente. Existe una amplia gama de intervenciones relacionadas con el manejo de suelo que ayudan a reducir el riesgo de escorrentía y erosión del suelo, que van desde intervenciones a nivel de finca, como labranza con curvas a nivel o con caballones entrelazados en curvas de nivel, microcuencas y cobertura de la superficie con rastrojos, hasta enfoques a nivel de paisaje, tales como elaboración de terrazas, instalación de mojoneras de piedra en curvas a nivel y reforestación.
- Mitigación: El manejo del suelo puede también ayudar a mitigar el cambio climático a través de una serie de intervenciones (Smith et al. 2007). 1 Los suelos son un importante «sumidero» bajo tierra para el secuestro de carbono y las intervenciones en el manejo de los suelos pueden ayudar a sacar partido de esa característica. Por ejemplo, la incorporación de materia orgánica que se recomienda en la Agricultura de Conservación (Richards et al. 2014, 2 y ver Estudio de caso más adelante), tla incorporación de árboles en los campos de cultivo y las mejoras en el manejo del pastoreo en pastizales naturales, todas ellas son prácticas que ayudan a incrementar el secuestro de carbono. La emisión de óxido nitroso, un gas de efecto invernadero (GEI), de los fertilizantes químicos solo se pueden reducir mediante enfoques integrales del manejo de fertilizantes nitrogenados, como el Manejo Integrado de la Fertilización del Suelo, por ejemplo (Fairhurst 2012; 3 Roobroeck et al. 2015. 4 vea también el Estudio de caso más adelante) con el cual sus defensores lograron reducir la cantidad y aplicaron el fertilizante nitrogenado químico más estratégicamente. Se sabe que los arrozales de tierras bajas con sumersión mantienen mucho más el carbono del suelo que aquellos arrozales que pasan por los ciclos de humectación y secado que se llevan a cabo en el cultivo de arroz y trigo o en las tierras altas con rotación de maíz y trigo (Ladha et al. 2011). 5
Recursos clave
Bronick CJ, Lal R. 2005. Soil structure and management: A review. Geoderma 124:3-22. Manejo y estructura del suelo: una revisión.
http://dx.doi.org/10.1016/j.geoderma.2004.03.005
Este artículo proporciona una explicación técnica detallada del papel crucial que desempeña la estructura del suelo en el funcionamiento de este que, a su vez, alberga especies de plantas y animales, además de ofrecer mayor potencial de secuestro de carbono en suelo. Asimismo, Bronick y Lal (2005) exploran los impactos medioambientales de la estructura del suelo, entre ellos las incertidumbres acerca del impacto de alta concentración de CO2 en el suelo y los aportes de la mejora en la cantidad de carbono orgánico en el suelo. Se toma en cuenta una diversidad de opciones de manejo, las cuales facilitan el aumento de la producción primaria vegetal y el mantenimiento del carbono en suelo, a la vez que se evita la pérdida de carbono por descomposición y erosión. Se exploran opciones clave de manejo que incluyen labranza reducida o labranza cero, el uso de rastrojos y el manejo de residuos, el compostaje y el manejo de los nutrientes. Además, prácticas de manejo agrícola, como el uso de cultivos de cobertura y la agrosilvicultura, pueden brindar beneficios adicionales del secuestro de carbono.
FAO. 2013. Climate-Smart Agriculture: Sourcebook. Module 4: Soils and their management for Climate-smart agriculture. Rome, Italy: Food and Agriculture Organization of the United Nations. Pp. 105-138.Manual de referencia de ASAC. Módulo 4: Los suelos y su manejo para una agricultura sostenible adaptada al clima.
http://www.fao.org/3/a-i3325e.pdf
Este módulo estudia el manejo del suelo dentro del contexto del cambio climático. Comienza con una visión panorámica de algunos de los principios de la salud del suelo y la manera en que los suelos interactúan con la atmósfera y con los ecosistemas terrestres y de agua dulce. Las opciones de manejo sostenible del suelo se presentan como una estrategia de triple ganancia, pues se secuestra carbono en suelo, se reducen las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y se ayuda a intensificar la producción; todo ello sin desmejorar los recursos naturales. El módulo también describe las prácticas que contribuyen a la adaptación y mitigación del cambio climático y la creación de resiliencia de los ecosistemas agropecuarios.
Corsi S, Friedrich T, Kassam A, Pisante M, de Moaraes Sà J. 2012. Soil organic carbon accumulation and greenhouse gas emission reductions from conservation agriculture: a literature review. Rome, Italy: Food and Agriculture Organization of the United Nations.Acumulación de carbono orgánico en el suelo y reducción de emisiones de gases de efecto invernadero desde una agricultura de conservación: revisión de literatura.
http://www.fao.org/3/a-i2672e.pdf
Esta publicación presenta un metanálisis de la literatura científica mundial con el propósito de llegar a comprender los impactos y beneficios de los dos tipos más comunes de agricultura, la de labranza tradicional y la Agricultura de Conservación, con respecto a sus efectos sobre las reservas de carbono del suelo. El estudio lo llevó a cabo la División de Producción Vegetal en colaboración con expertos de varias universidades y tiene por objeto reducir la incertidumbre existente en cuanto al impacto de las prácticas de manejo del suelo sobre las reservas de carbono del suelo y el balance de carbono.
Powlson DS, Gregory PJ, Whalley WR, Quinton JN, Hopkins DW, Whitmore AP, Hirsch PR, Goulding KWT. 2011. Soil management in relation to sustainable agriculture and ecosystem services. Food Policy 36:S72-S87.El manejo de suelo en función de la agricultura sostenible y los servicios ecosistémicos.
http://dx.doi.org/10.1016/j.foodpol.2010.11.025
Powlson et al. (2011) brindan una revisión muy útil sobre prácticas de manejo de suelo para una agricultura sostenible y para mejorar los servicios ecosistémicos, con énfasis en implementar los resultados de la investigación en políticas y en la práctica. Se describen los beneficios específicos recibidos del suelo, tanto en la producción de alimento como en el entorno social y del ecosistema. Sin embargo, existen disyuntivas entre las funciones del suelo para la producción agropecuaria y los servicios ecosistémicos. El artículo hace una revisión de la literatura relevante para destacar algunos de los principales problemas a afrontar. Los pros, los contras y los temas de investigación y acción en manejo de suelos incluyen: manejo del carbón en suelo, manejo de los nutrientes, optimización de los procesos biológicos del suelo, interacciones suelo-raíz, minimización de la erosión y uso del biocarbono. Además, el artículo toma en consideración aspectos sociales, económicos y de gobernanza y sostiene que no todas las prácticas de manejo se podrán implementar en todas las regiones o escalas, pues algunas serán adoptadas mejor por parte de agricultores con acceso a infraestructura, mientas otras podrán aportar beneficios significativos a los medios de sustento de pequeños agricultores. La colaboración y comunicación efectiva entre investigadores de diferentes áreas, responsables de la formulación de políticas a distintos niveles y los mismos profesionales se ve como un reto que se debe superar para lograr la seguridad alimentaria y evaluar de manera adecuada los impactos medioambientales de la actividad agropecuaria.
CCAFS Big Facts website
Emisiones agropecuarias derivadas directamente del suelo:
https://ccafs.cgiar.org/bigfacts/#theme=food-emissions&subtheme=direct-agriculture
Estudios de caso
Referencias
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1
Smith P et al. 2008. Greenhouse gas mitigation in agriculture. Philosophical Transactions of the Royal Society B 363:789-813.
http://dx.doi.org/10.1098/rstb.2007.2184 Mitigación de gases de efecto invernadero en agricultura. Las tierras agrícolas ocupan un 37 % de la superficie terrestre de la Tierra. La agricultura es responsable del 52 y 84 % de emisiones antropogénicas mundiales de metano y óxido nitroso, respectivamente. Los suelos agrícolas también pueden actuar como sumidero o fuente de CO2, pero el flujo neto es pequeño. Muchas prácticas agrícolas tienen potencial de mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), de las cuales, las que más destacan son el mejoramiento del manejo del cultivo y los pastizales, la recuperación de tierras degradadas y suelos orgánicos cultivados. Con el manejo del arroz y el agua, establecimiento de reservas, cambio del uso de la tierra y agrosilvicultura, manejo del ganado y el estiércol se puede lograr una mitigación menor, pero significativa aún. Para el año 2030, el potencial global técnico de mitigación de emisiones de la agricultura (sin incluir la compensación de combustibles fósiles con biomasa), tomando en consideración todos los gases, se estima en aproximadamente 5500 a 6000 Mt CO2-eq/año, con potenciales económicos de aproximadamente 1500-1600, 2500-2700 y 400-4300 Mt CO2-eq/año a precios de carbono de hasta USD 20, hasta USD 50 y hasta USD 100/t CO2-eq, respectivamente. Además, las emisiones de GEI se podrían reducir mediante la sustitución de combustibles fósiles por producción de energía a partir de materias primas agrícolas (p.ej. residuos de cultivos, estiércol y cultivos energéticos). El potencial de mitigación de la energía de biomasa de la agricultura se estima en 640, 2240 y 16 000 Mt CO2-eq/año a USD 0-20, USD 0-50 y USD 0-100/t CO2-eq, respectivamente. -
2
Richards M, Sapkota T, Stirling C, Thierfelder C, Verhulst N, Friedrich T, Kienzle J. 2014. Conservation agriculture: Implementation guidance for policymakers and investors. Climate-Smart Agriculture Practice Brief. Copenhagen, Denmark: CCAFS.
https://cgspace.cgiar.org/rest/bitstreams/34456/retrieve Agricultura de Conservación: orientación para la implementación para responsables de la formulación de políticas e inversionistas. La agricultura de conservación (AC) puede aumentar la resiliencia al cambio climático y posee el potencial de contribuir a la mitigación del cambio climático. Los beneficios de la AC son muy específicos para el sitio donde se aplica. Se necesita de enfoques innovadores para superar las barreras de adopción de la AC por parte de pequeños agricultores. -
3
Fairhurst T, (Ed.). 2012. Handbook for Integrated Soil Fertility Management. Pondicherry, India: Africa Soil Health Consortium.
http://www.tropcropconsult.com/downloads_files/Fairhurst2012.pdf Manual de Manejo Integrado de la Fertilidad del Suelo (MIFS). Este manual se realizó para la capacitación de extensionistas en técnicas de manejo integrado de la fertilidad del suelo en ASS y para quienes trabajan en desarrollo rural y quisieran aprender más sobre los principios y las prácticas del MIFS. Este manual también es una guía de MIFS útil para organizaciones educativas, tales como universidades y escuelas técnicas, organizaciones involucradas en la formulación de políticas agrícolas y desarrollo rural que necesitan material de referencia sobre técnicas de MIFS y para otras organizaciones gubernamentales y no gubernamentales (ONG) que buscan implementar el MIFS. -
4
Roobroeck D, van Asten P, Jama B, Harawa R, Vanlauwe B. 2015. Integrated Soil Fertility Management: Contributions of framework and practices to climate-smart agriculture. Copenhagen, Denmark: CCAFS.
https://cgspace.cgiar.org/bitstream/handle/10568/69018/CCAFSpbSoil.pdf?sequence=6&isAllowed=y Manejo Integrado de la Fertilidad del Suelo: contribuciones del marco y prácticas para una agricultura sostenible adaptada al clima. El Manejo Integrado de la Fertilidad del Suelo (MIFS) consiste en un conjunto de prácticas relacionadas con prácticas agrícolas, fertilizantes, recursos orgánicos y otras enmiendas realizadas en las pequeñas explotaciones para aumentar la producción y el uso eficiente de los insumos. El MIFS aporta ganancias en productividad, mayor resiliencia y beneficios de mitigación. El MIFS representa beneficios para la seguridad alimentaria e ingresos, aumenta la estabilidad de los rendimientos en sistemas de secano y reduce las emisiones de gases de efecto invernadero de suelos y fertilizantes, lo cual lo hace valioso para la agricultura sostenible adaptada al clima. -
5
Ladha JK, Reddy CK, Padre AT, Kessel CV. 2011. Role of Nitrogen Fertilization in Sustaining Organic Matter in Cultivated Soils. Journal of Environmental Quality. 40, 1756-1766.
http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/22031558 Función de la fertilización nitrogenada en la conservación de materia orgánica en suelos cultivados. La materia orgánica del suelo (MOS) es esencial para sustentar la producción de alimento y mantener los servicios ecosistémicos, además de ser un recurso base vital para almacenar C y N. Sin embargo, el impacto del uso de fertilizantes nitrogenados químicos sobre el contenido de MOS ha sido cuestionado recientemente. En este trabajo analizamos la hipótesis de que la aplicación de N a largo plazo ocasiona una disminución del contenido de MOS. Utilizamos datos de 135 estudios de 114 experimentos a largo plazo, ubicados en 100 sitios alrededor del mundo, a escalas temporales de décadas, bajo un rango de regímenes de manejo y clima, para cuantificar los cambios en el contenido de carbono orgánico del suelo (COS) y nitrógeno orgánico del suelo (NOS). Los datos publicados de un total de 917 y 580 observaciones para COS y NOS, respectivamente, del testigo (sin fertilizar o cero N) y tratamientos con fertilización nitrogenada (química, orgánica y combinación) se analizaron utilizando el modelo mixto de SAS y metanálisis. Los resultados demuestran disminuciones de 7 a 16 % en contenido de COS y de 7 a 10 % en el de NOS sin enmiendas de N. En suelos donde se aplicó fertilizante nitrogenado químico, el índice de pérdida de MOS se redujo. La respuesta en cuanto a la proporción tiempo-fertilizante, basada en cambios en las combinaciones pareadas, mostró incrementos promedio de 8 y 12 % para COS y NOS, respectivamente, luego de la aplicación del fertilizante nitrogenado químico. La aplicación de materia orgánica (estiércol) aumentó el contenido de MOS en 37 %, en promedio. Cuando los sistemas de cultivos fluctuaban entre inundación y secado, la MOS disminuyó más que en tierras áridas o sistemas inundados continuos. El suelo plantado con arroz continuamente anegado (L.) muestra acumulaciones netas de COS y NOS. Este trabajo demuestra una disminución general del contenido de MOS en sitios a largo plazo, con y sin la aplicación de fertilizante nitrogenado químico. No obstantes, nuestro análisis también demuestra que, además de su función en el mejoramiento de la productividad de los cultivos, el fertilizante nitrogenado químico reduce significativamente el índice al que se pierde la MOS en suelos agrícolas de todo el mundo.
Producción agrícola
Introducción
La producción de alimento, fibra y forraje se realiza por medio de una amplia variedad de sistemas de producción agrícola, cada uno bajo condiciones socioeconómicas, de suelo y climáticas muy diversas. Por ejemplo, la producción de algunos cultivos es de secano, en tanto la de otros, con riego. Hoy en día se presta mucha atención a la gran diversidad de prácticas agrícolas consideradas «sostenibles y adaptadas al clima», ya sea desde el punto de vista de la adaptación, como por su potencial de mitigación. Dichas oportunidades de sostenibilidad y adaptación al clima se encuentran mediante una vasta gama de puntos de entrada que van desde el manejo del agua y el suelo hasta prácticas agroforestales. Esta sección se centrará en explicar cómo innovaciones «específicas por cultivo» pueden contribuir sustancialmente a alcanzar una agricultura sostenible adaptada al clima (ASAC).
Su contribución a la ASAC
- Productividad: La productividad agrícola se puede aumentar mediante el mejoramiento de variedades para que tengan mayor rendimiento, mediante el manejo agronómico y de los nutrientes y mediante la selección de cultivos que tengan un mejor potencial de rendimiento.
- Adaptación a corto plazo mediante la gestión de los riesgos climáticos: Algunas intervenciones agrícolas pueden disminuir de manera considerable el riesgo de una disminución del rendimiento o una mala cosecha. Por ejemplo, los cultivos se pueden mejorar genéticamente para que tengan mayor tolerancia a las sequías y, junto con variedades de ciclo más corto, se pueden utilizar para conseguir «evadir la sequía terminal» (ver CIMMYT e IITA 2015, 6Estudio de caso 2 y Estudio de caso 3). De manera similar, el mejoramiento para crear resistencia a plagas y enfermedades causadas por fenómenos meteorológicos también brinda una fuente importante de reducción del riesgo climático. El mejoramiento para crear resistencia a sequía, plagas y enfermedades está tomando mayor importancia debido a que se proyecta un aumento en el riesgo de sequías en muchas regiones y la distribución y severidad de brotes de plagas y enfermedades también cambiarán a medida que cambie el clima (FAO 2008). 7
- Adaptación a largo plazo mediante el cambio: A medida que continúe el calentamiento global, la adaptación a largo plazo será indispensable. Esto se puede lograr por medio del desarrollo y siembra de variedades de cultivos tolerantes a las altas temperaturas, a la sequía o a la salinidad, o bien, cambiándose a cultivos que tengan mayor tolerancia al calor y a la sequía. Por ejemplo, cereales como el mijo y el sorgo son los cultivos más resistentes a ambientes severos, secos y calurosos (ICRISAT 2014). 8 Los agricultores que actualmente cultivan maíz, en el futuro quizá tendrán que cambiarse a estos cultivos alternativos (ICRISAT 2015). 9 Otra estrategia de adaptación es la sustitución de cultivos anuales potencialmente vulnerables por cultivos perennes más resistentes (ver Estudio de caso 1). Más aún, en regiones que ya son marginales para la producción agrícola, los agricultores bien podrían tener que adaptarse de manera más drástica, dejando de lado los cultivos por la crianza de ganado (Jones and Thornton 2008). 10
- Mitigación: El potencial de mitigación de la producción agrícola proviene en gran medida del manejo del suelo y agua o del sistema agroforestal donde crecen los cultivos (ver puntos de entrada 1, 4 y 6). Sin embargo, los cultivos perennes son capaces de secuestrar mayores cantidades de carbono del suelo que los cultivos anuales (Glover et al. 2007). 11
Recursos clave
Rosegrant MW, Koo J, Cenacchi N, Ringler C, Robertson R, Fisher M, Cox C, Garrett K, Perez N, Sabbagh P. 2014. Food Security in a World of Natural Resource Scarcity: The Role of Agricultural Technologies. Washington, DC: International Food Policy Research Institute (IFPRI).Seguridad alimentaria en un mundo con escasez de recursos naturales: el papel de las tecnologías agrícolas.
http://www.ifpri.org/cdmref/p15738coll2/id/128022/filename/128233.pdf
Este libro busca responder al desafío de cultivar alimentos de manera sostenible sin degradar nuestros recursos naturales. El análisis se vale del enfoque de modelización que combina la elaboración de modelos integrales basados en los procesos de tecnologías agrícolas con sofisticados modelos de comercialización, sumistro y demanda mundial de alimentos. Este enfoque evalúa el impacto en el rendimiento y la alimentación de una gran diversidad de tecnologías agrícolas bajo diferentes supuestos de cambio climático, hasta el 2050, para tres cultivos básicos clave: maíz, arroz y trigo. Dirigido a los responsables de las políticas en los ministerios de agricultura e institutos nacionales de investigación agrícola, así como bancos multilaterales de desarrollo y el sector privado, el libro ofrece una guía sobre las estrategias tecnológicas y cuál aplicar a medida que aumenta la competencia por la tierra, agua y energía entre sectores e incluso a través de las fronteras. También es una herramienta útil para decidir cómo orientar las inversiones, tanto actuales como a futuro.
FAO. 2013. Climate-Smart Agriculture Sourcebook. Module 6: Conservation and sustainable use of genetic resources for food and agriculture. Rome, Italy: Food and Agriculture Organization of the United Nations. Pp. 171-190.Manual de referencia de ASAC. Módulo 6: Conservación y uso sostenible de los recursos genéticos para la alimentación y la agricultura.
http://www.fao.org/3/a-i3325e.pdf
Este módulo describe la naturaleza de los recursos genéticos para la alimentación y la agricultura y plantea la razón por la que dichos recursos son esenciales para la agricultura sostenible adaptada al clima. Luego de una breve descripción de los impactos esperados del cambio climático sobre los recursos genéticos para la alimentación y la agricultura, el módulo destaca su papel en la adaptación y mitigación del cambio climático Se emplean ejemplos de todo el mundo para demostrar cómo la conservación y el aprovechamiento de una amplia diversidad genética, tanto entre como dentro de las especies de plantas y animales destinados a la alimentación, puede beneficiar a las generaciones presentes y futuras.
FAO. 2013. Climate-Smart Agriculture Sourcebook. Module 7: Climate-smart crop production system. Rome, Italy: Food and Agriculture Organization of the United Nations. Pp. 191-204.Manual de referencia de ASAC. Módulo 7: Sistemas agrícolas sostenibles adaptados al clima.
http://www.fao.org/3/a-i3325e.pdf
La primera parte de este módulo esboza los impactos del cambio climático sobre la producción agrícola. La segunda parte describe el paradigma de la intensificación sostenible de la producción agrícola (ISPA) e ilustra cómo la agricultura es intrínsecamente «sostenible y adaptada al clima». Al describir los principios básicos de la ISPA, el módulo se apoya en buena medida en las publicaciones de la FAO: Ahorrar para crecer (una valiosa fuente de información, estudios de caso y referencias técnicas) que fueron producidas después de una Consulta de Expertos que se realizó en 2010. Constituyen una guía y set de herramientas de tecnologías y prácticas sostenibles y, además, explora las políticas y disposiciones institucionales para la implementación de la ISPA a gran escala. El módulo también describe opciones para que los gestores de tierras y los agricultores se adapten y contribuyan a la mitigación del cambio climático. Contiene recuadros donde se brindan ejemplos de prácticas, técnicas y enfoques agrícolas sostenibles para la adaptación y mitigación del cambio climático.
Snyder CS, Bruulsema TW, Jensen TL, Fixen PE. 2009. Review of greenhouse gas emissions from crop production systems and fertilizer management effects. Agriculture, Ecosystems and Environment 133:247-266.Revisión de las emisiones de gases de efecto invernadero provenientes de los sistemas de producción agrícola y los efectos del manejo de fertilizantes.
http://dx.doi.org/10.1016/j.agee.2009.04.021
Este artículo realiza una revisión de literatura de las mejores prácticas para el manejo agrícola y de fertilizantes, en términos de su potencial para mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero. Además ofrece una perspectiva general de diversas fuentes agrícolas de gases de efecto invernadero y sumideros. Las prácticas investigadas incluyen diferentes sistemas de labranza, de drenaje, de cultivo y el uso de fertilizantes orgánicos y químicos (producción y transporte incluidos). Un manejo adecuado de los fertilizantes es clave para optimizar los rendimientos, al tiempo que se minimizan las emisiones de gases de efecto invernadero; ello permite a los agricultores aprovechar al máximo el terreno agrícola y evitar la conversión de más áreas naturales. Los factores que influyen la efectividad del uso de fertilizantes incluyen la fuente, el momento, la cantidad y la forma de aplicación. Para cumplir tanto con las exigencias de seguridad alimentaria como con la mitigación de los gases de efecto invernadero, el artículo recomienda un manejo intensivo ecológico, enfocado en aumentar la eficiencia en el uso de nutrientes y las ganancias en el rendimiento. La aplicación de mejores prácticas de manejo en cultivos de alto rendimiento puede contribuir a la mitigación, mediante un mejor almacenamiento de carbono del suelo.
Lin BB. 2011. Resilience in agriculture through crop diversification: Adaptive management for environmental change. BioScience 61(3):183-193.Resiliencia en la agricultura mediante la diversificación de cultivos: manejo adaptativo para los cambios medioambientales.
http://dx.doi.org/10.1525/bio.2011.61.3.4
Lin (2011) propone la diversificación de cultivos como un método económico para mejorar la resiliencia de los sistemas agrícolas. El cambio climático tendrá diversos impactos sobre la producción, incluida una mayor variabilidad climática y patrones meteorológicos cambiantes, que a su vez tendrán repercusiones en la productividad agrícola, debido a cambios en los ciclos de los nutrientes y brotes más frecuentes de plagas y enfermedades. Lin (2011) sostiene que una mayor biodiversidad aumentará la resiliencia de los agroecosistemas a dichos desafíos climáticos, además de ofrecer un suministro más eficaz de los servicios ecosistémicos. La diversificación se puede llevarse a cabo de varias maneras (p. ej. con el uso de variedades diferentes) a diferentes escalas (p. ej. dentro de un mismo cultivo, a lo largo de un paisaje), lo cual significa que los agricultores disponen de muchas soluciones diferentes. Lin (2011) argumenta que prácticas como el uso de variedades heterogéneas pueden incrementar la resistencia a plagas y enfermedades, en tanto la agrosilvicultura y los cultivos asociados pueden amortiguar los efectos de cambios drásticos en la temperatura y la precipitación. Sin embargo, la adopción de dichas prácticas ha sido lenta debido a políticas de incentivos que favorecen los monocultivos. El artículo señala que es necesario identificar los beneficios económicos de las estrategias de diversificación y ponerlos en práctica por medio de políticas de incentivos y enfoques participativos con las partes interesadas para atender las necesidades de los agricultores.
Kole C. et al. 2015. Application of genomics-assisted breeding for generation of climate resilient crops: progress and prospects. Front Plant Sci. 6:563.Aplicación de técnicas de mejoramiento asistido por genómica para generar cultivos resilientes al clima: avances y perspectivas.
http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/26322050
El cambio climático afecta la productividad en todo el mundo. El incremento de los precios de los productos alimenticios es el primer indicador de las drásticas pérdidas en la producción de comestibles, las cuales se espera que aumenten aún más por el calentamiento global. Esta situación ha obligado a los científicos a desarrollar cultivos resilientes al cambio climático que puedan resistir a una amplia gama de presiones, tales como sequía, calor, frío, salinidad, inundaciones, sumersión y plagas, con lo que ayudarían a aumentar la productividad. La genómica parece ser una herramienta prometedora para descifrar la respuesta al estrés de cultivos con características de adaptación o sus parientes silvestres para identificar genes, alelos o loci de caracteres cuantitativos. Las estrategias de mejoramiento molecular han demostrado ser útiles en el aumento de la adaptación de los cultivos al estrés. Los últimos avances en secuenciación de alto rendimiento y las plataformas de fenotipado han transformado el mejoramiento molecular en mejoramiento asistido por genómica (GAB, por sus siglas en inglés) En vista de ello, la presente revisión detalla los avances y perspectivas del GAB para mejorar la resiliencia al cambio climático en cultivos, lo cual probablemente desempeñe un papel cada vez más importante en los esfuerzos para asegurar la seguridad alimentaria mundial.
Wassmann R, Jagadish SVK, Heuer S, G, Ismail, Redoña E, Serraj R, Singh RK, Howell A, Pathak H, Sumfleth K. 2009. Climate Change Affecting Rice Production: The Physiological and Agronomic Basis for Possible Adaptation Strategies. Advances in Agronomy 101: 59-122.El cambio climático afecta la producción de arroz: fundamentos fisiológicos y agronómicos para posibles estrategias de adaptación.
http://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S006521130800802X
Esta revisión aborda posibles estrategias de adaptación en la producción de arroz frente a presiones abióticas que el cambio climático podría agravar: térmica (altas temperaturas y humedad), sequía, salinidad y sumersión. Cada estrés se discute con respecto al estado actual del conocimiento sobre el mecanismo vegetal del daño dentro de la planta de arroz, así como posibles avances en tecnologías de manejo del germoplasma y los cultivos para afrontar las pérdidas de producción. Temperaturas más altas pueden afectar negativamente los rendimientos de arroz a través de dos vías principales, a saber: (i) temperaturas máximas que, en combinación con alta humedad, causa esterilidad de la espiguilla, con lo que se ve afectada la calidad del grano y (ii) aumento en las temperaturas nocturnas que pueden reducir la acumulación de asimilados. Por otra parte, algunas variedades de arroz se cultivan en ambientes extremadamente calurosos, por lo que el desarrollo de germoplasma de arroz mejorado para resistir altas temperaturas puede aprovechar un enorme acervo génico para esa característica. De la misma manera, la sequía es un fenómeno común en muchos ambientes donde se cultiva el arroz y la investigación agrícola ha logrado importantes avances en cuanto al mejoramiento del germoplasma y manejo del cultivo (p. ej. técnicas para ahorrar agua) para enfrentar la complejidad de los síntomas de estrés por sequía. El arroz es sumamente sensible a la salinidad, que a menudo coincide con otras presiones como sequía en áreas de arroz de secano o sumersión en áreas costeras. La tolerancia a la sumersión en arroz se ha mejorado considerablemente por medio de la introgresión del gen Sub1 en variedades populares de arroz en varias zonas arroceras de Asia.
Wassmann R, Jagadish SVK, Sumfleth K, Pathak H, Howell G, Ismail A, Serraj R, Redoña E, Singh RK and Heuer S. 2009. Regional vulnerability of climate change impacts on Asian rice production and scope for adaptation. Advances in Agronomy 102: 91-133.Vulnerabilidad regional a los impactos del cambio climático en la producción asiática de arroz y ámbito de adaptación.
http://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0065211309010037
El arroz es el cultivo básico principal de Asia y cualquier deterioro en los sistemas de producción por el cambio climático puede perjudicar seriamente la seguridad alimentaria del continente. Esta revisión evalúa las vulnerabilidades espaciales y temporales de diversos sistemas de producción de arroz a los impactos del cambio climático en Asia. Inicialmente, la revisión discute los riesgos del aumento del estrés térmico y mapea las regiones donde las temperaturas actuales ya se están acercando a niveles críticos durante las etapas susceptibles del crecimiento de la planta de arroz, concretamente Pakistán/norte de la India (oct.), sur de la India (abril, ago.), este de la India/Bangladés (marzo-junio), Myanmar/Tailandia/Laos/Camboya (marzo-junio), Vietnam (abril/ago.), Filipinas (abril/junio), Indonesia (ago.) y China (julio/ago.). Las posibles opciones de adaptación al estrés térmico se derivan de regiones donde el cultivo del arroz ya está expuesto a temperaturas muy altas, que incluyen Irán y Australia. También se espera que las sequías se agraven por el cambio climático, por lo que un mapa que sobrepone la distribución del arroz de secano y anomalías en las precipitaciones en el altiplano asiático destaca áreas especialmente vulnerables en el este de la India/Bangladés y Myanmar/Tailandia.
Paris TR, Manzanilla D, Tatlonghari G, Labios R, Cueno A, Villanueva D (2011) Guide to participatory varietal selection for submergence-tolerant rice. Los Baños (Philippines): International Rice Research InstituteGuía para selección varietal participativa (PVS) de arroz tolerante a la sumersión.
http://books.irri.org/9789712202629_content.pdf
La selección varietal participativa (PVS, por sus siglas en inglés) es una manera sencilla de que los mejoradores y agrónomos conozcan qué variedades se desempeñan bien dentro de la estación experimental, así como en campo, y que reciban retroalimentación de parte de los potenciales usuarios finales desde las fases tempranas del ciclo de mejoramiento. Es un medio por el que los científicos sociales identifican las variedades que prefieren los agricultores y agricultoras, las razones y limitaciones para su adopción. Apoyados en la experiencia de IRRI, en colaboración con socios investigadores, extensionistas y agricultores del país, la PVS incluye ensayos «manejados por investigadores» y «manejados por agricultores» y es una estrategia efectiva para acelerar la diseminación de variedades con tolerancia al estrés. La PVS también ha sido determinante para la liberación rápida de variedades con tolerancia al estrés mediante el sistema formal de liberación de variedades. Esta guía sobre la PVS complementará los diversos programas de capacitación impartidos por IRRI a mejoradores, agrónomos y extensionistas involucrados en el desarrollo y diseminación de variedades de arroz..
CCAFS Big Facts website
Cultivos y sistemas agrícolas:
https://ccafs.cgiar.org/bigfacts/#theme=climate-impacts-production&subtheme=crops
Adaptación de cultivos y sistemas agrícolas:
https://ccafs.cgiar.org/bigfacts/#theme=adaptation&subtheme=crops
Evidencia del éxito alcanzado en cultivos y sistemas agrícolas:
https://ccafs.cgiar.org/bigfacts/#theme=evidence-of-success&subtheme=crops&csSubtheme=true
Estudios de caso
Referencias
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6
CIMMYT, IITA. 2015. The Drought Tolerant Maize for Africa Initiative (DTMA).
http://dtma.cimmyt.org/index.php La iniciativa de maíz tolerante a la sequía para África (DTMA) El sitio web del CIMMYT y el IITA contiene las últimas historias y avances en cuanto a la iniciativa de maíz tolerante a la sequía para África. -
7
FAO. 2008. Climate related transboundary pests and diseases. Technical Background Document for the Expert Consultation held on 25 to 27 February 2008. Rome, Italy: Food and Agriculture Organization of the United Nations.
http://www.fao.org/3/a-ai785e.pdf Plagas y enfermedades transfronterizas relacionadas con el clima. El traslado de plagas vegetales, enfermedades animales y especies exóticas invasivas acuáticas a través de fronteras físicas y políticas amenaza la seguridad alimentaria y suscitan una preocupación pública en todos los países y regiones del mundo. Los países asignan una gran cantidad de recursos controlar e impedir la diseminación de plagas y enfermedades transfronterizas, tales como gripe aviar, fiebre aftosa y langostas. Además, adaptan los servicios y actividades de salud animal y vegetal y cooperan a nivel regional y mundial en la prevención, sistemas de alerta y control. -
8
ICRISAT. 2014. Millets and sorghum: Climate-smart grains for a warmer world. CGIAR Development Dialogues 2014. Montpellier, France: CGIAR
http://dialogues.cgiar.org/blog/millets-sorghum-climate-smart-grains-warmer-world/ Mijo y sorgo: granos sostenibles adaptados al clima para enfrentar un mundo más caluroso. Esta entrada del blog de ICRISAT explica cómo y por qué el mijo y el sorgo pueden ser una fuente sostenible de alimento, capaz de ayudar a combatir la pobreza y la inseguridad alimentaria. -
9
ICRISAT. 2015. Go for sorghum, say climate smart Kenyan farmers. ICRISAT Happenings In-house Newsletter no. 1660. Telangana, India: ICRISAT.
http://www.icrisat.org/newsroom/latest-news/happenings/1660/1660.pdf Hay que decidirse por el sorgo, dicen los agricultores kenianos. Este reportaje narra los beneficios del sorgo para la resiliencia climática y la seguridad alimentaria. -
10
Jones PG, Thornton PK. 2008. Croppers to livestock keepers: livelihood transitions to 2050 in Africa due to climate change. Environmental Science and Policy 12(4):427-437.
http://dx.doi.org/10.1016/j.envsci.2008.08.006 De agricultores a ganaderos: transiciones de los medios de subsistencia hacia 2050 en África por el cambio climático. Habitualmente, se espera que los impactos del cambio climático sean perjudiciales para la agricultura en muchas partes de África. En líneas generales, el calentamiento y las sequías pueden reducir los rendimientos de los cultivos de 10 a 20 % para el año 2050, pero existen lugares donde las pérdidas probablemente sean mucho mayores. El aumento de la frecuencia de estrés térmico, sequías e inundaciones tendrá efectos aún más nocivos en la productividad de los cultivos y del ganado. En las próximas décadas, habrá lugares en los que las estrategias de subsistencia de la población rural deban cambiar para mantener la seguridad alimentaria y brindar opciones que generen ingresos. Entre ellos se incluyen áreas de África que ya son consideradas marginales para la producción agrícola y, en la medida en que se vuelvan más marginales, la producción pecuaria puede ser una alternativa a los cultivos. Realizamos algunos análisis para identificar áreas en el África subsahariana, donde es posible que ocurran tales transiciones. Para las áreas que actualmente se encuentran bajo cultivo (que ya incluyen las áreas del altiplano, donde es posible que la intensidad de cultivo aumente en el futuro), calculamos las probabilidades de cosechas fallidas para las condiciones climáticas actuales y las comparamos con los cálculos para condiciones climáticas en 2050; para ello utilizamos el producto de modelo climático de escala reducida, para un escenario con mayores emisiones de gases de efecto invernadero y para uno con menores. Se pueden identificar zonas de transición donde la mayor probabilidad de cosechas fallidas puede inducir la transición de la producción agrícola a una mayor dependencia de la producción pecuaria. Dichas zonas se caracterizaron en términos de los sistemas agropecuarios existentes, densidades actuales de ganado y niveles de pobreza. El análisis proporciona más evidencia de que los impactos del cambio climático en las tierras agrícolas marginales podría ser severo donde los índices de pobreza ya son altos. Los resultados también sugieren que aquellos que tienen más probabilidad de verse afectados, en promedio, ya son más pobres. Discutimos las implicaciones de estos resultados dentro de un contexto enfocado a la investigación para el desarrollo que prevé que los pobres serán desproporcionadamente perjudicados por el cambio climático. -
11
Glover JD, Cox CM, Reganold JP. 2007. Future Farming: A Return to the Roots? Scientific American August 2007:83-89.
https://landinstitute.org/wp-content/uploads/2014/04/Glover-et-al-2007-Sci-Am.pdf Agricultura del futuro: ¿de vuelta a las raíces? El uso intensivo de la tierra en la agricultura moderna destruye la biodiversidad natural y los ecosistemas. Mientras tanto, el tamaño de la población se elevará hasta alcanzar entre 8 y 10 millardos de personas en las próximas décadas, lo cual requerirá que se cultive más área. Reemplazar cultivos anuales con especies perennes permitiría desarrollar grandes sistemas radiculares, capaces de preservar el suelo y que permitirían cultivar áreas actualmente consideradas marginales. El reto es colosal, pero si los fitomejoradores lo logran, estarían emulando la domesticación original de cultivos de la humanidad a lo largo de los últimos 10 milenios: sería igual de revolucionario.
Manejo del agua
Introducción
La agricultura se considera el mayor consumidor de los recursos de agua dulce, demandando el 70 % del suministro disponible, 40 % del cual se utiliza en la producción de arroz (Bouman et al. 2007). 12 En la medida en que la población mundial aumenta y consume más alimentos y las industrias y urbanizaciones se expanden, la escasez de agua se va convirtiendo en un problema cada vez mayor, con lo que mejores sistemas de manejo del agua son indispensables. Dada la función fundamental del agua en la actividad agropecuaria, el alcance del manejo del agua no solo es vasto, sino también complejo, como se refleja parcialmente en los siete temas de investigación del Instituto Internacional para el Manejo del Agua (IWMI) (IWMI 2015). 13 Debido a esa complejidad, muchas opciones para mejorar el manejo del agua se relacionan con otros puntos de entrada (ver los ejemplos en Manejo del suelo, Producción agrícola, Manejo del ganado, Silvicultura y agrosilvicultura, Pesca de captura y acuicultura, Servicios de información meteorológica, Compromisos en materia de políticas y Manejo de paisajes). Esta sección se centra en el mejoramiento del manejo del agua en sistemas agrícolas de secano y bajo riego a diferente escala, es decir (i) a nivel de finca, (ii) a nivel de sistemas de riego o captación de agua y (iii) a nivel nacional o de cuenca.
Bajo un sistema agrícola de secano, se pueden realizar mejoras en el manejo del agua por medio de cosecha de agua de lluvia, prácticas de manejo de suelos que ayuden a captar y retener el agua de lluvia y mediante innovaciones en fertilidad de suelos y manejo del cultivo que mejoren el crecimiento y el rendimiento, de manera que también se mejore la eficiencia en el uso del agua (ver el punto de entrada en Manejo de suelos), o por medio de riego suplementario en cultivos de tierras áridas (ver Estudio de caso 2 más adelante).
En sistemas de riego se pueden lograr mejoras en el manejo del agua para una mayor eficiencia en el uso del agua en varias etapas del proceso de riego, desde la fuente de agua, en los sistemas de conducción y aplicación, la programación del riego y la disponibilidad de agua en la zona de la raíz (Nicol et al. 2015) 14 describen muchos ejemplos de ese tipo, extraídos de África oriental (Tuong et al. 2005) 15 por su parte, se enfocan en sistemas de cultivo de arroz en Asia.
Su contribución a la ASAC
- Productividad: En ausencia de otros factores que limiten el crecimiento de los cultivos, la productividad agrícola se verá incrementada por todas aquellas innovaciones que persigan reducir el estrés hídrico en la planta mediante de mejoras en la captación y retención del agua de lluvia o la mejora en la programación y aplicación del riego.
- Adaptación mediante la gestión de riesgos a corto plazo: Muchas innovaciones en el manejo del agua (p. ej. riego suplementario y captación de agua de lluvia) se diseñan específicamente para reducir o eliminar el riesgo del estrés hídrico y de la disminución del rendimiento.
- Adaptación mediante la gestión de riesgos a largo plazo: Las implicaciones del cambio climático para el manejo del agua son específicas para cada contexto. Sin embargo, en muchas regiones es muy probable que incluyan mayor demanda y menor disponibilidad de agua. En tales circunstancias, sobre todo donde se proyecta que el número de habitantes se incremente significativamente, todas aquellas innovaciones que aumenten la disponibilidad o se enfoquen en reducir el consumo de agua a través de una mayor eficiencia en el uso del agua en agricultura de secano o en sistemas de riego son un mecanismo importante de adaptación a largo plazo.
- Mitigación: Los sistemas de cultivo de arroz por anegamiento emiten cantidades considerables de metano (CH4), un gas de efecto invernadero (GEI). Los ciclos de alternancia humectación/secado en dichos sistemas no solo ahorran agua, sino que además reducen en gran medida las emisiones de metano (ver Estudio de caso 1) (Sander et al. 2016). 16 Además, las estrategias de riego que reducen la cantidad de agua a utilizar pueden reducir el consumo de energía de bombeo y reducir así las emisiones (Lampayan et al. 2015). 17
Recursos clave
FAO. 2013. Climate-Smart Agriculture Sourcebook. Module 3: Water Management. Rome, Italy: Food and Agriculture Organization of the United Nations. Pp. 81-97.Manual de referencia de ASAC. Módulo 3: Manejo del agua.
http://www.fao.org/3/a-i3325e.pdf
Este módulo examina el contexto general en que se lleva a cabo el manejo del agua en la agricultura y proporciona una visión panorámica del estado actual, tendencias y retos. También analiza el estado actual del conocimiento de los impactos del cambio climático sobre el agua para la agricultura y la vulnerabilidad de las poblaciones rurales y los sistemas agropecuarios. A esto sigue una evaluación de posibles opciones de respuesta para hacer frente a dichos impactos, las cuales se pueden implementar a diferente escala, en fincas individuales, en esquemas de riego más grandes, en toda una cuenca y a nivel nacional. El módulo también presenta criterios para priorizar las opciones de respuesta, analiza condiciones para la adaptación al cambio climático y revisa oportunidades para su mitigación.
Turral H, Burke , Faurès JM. 2011. Climate change, water and food security. FAO Water Report No. 36. Rome, Italy: Food and Agriculture Organization of the United Nations.Cambio climático, agua y seguridad alimentaria.
http://www.fao.org/docrep/018/i3325e/i3325e03.pdf
Este informe resume el conocimiento actual de los impactos esperados del cambio climático sobre la disponibilidad de agua para la agricultura. Analiza las implicaciones para la seguridad alimentaria local y nacional y discute los métodos y enfoques para evaluar los impactos del cambio climático sobre el agua y la agricultura. El informe pone énfasis en la necesidad de una alineación más estrecha entre las políticas sobre agua y las agrícolas y argumenta en favor de la implementación inmediata de estrategias «útiles en todo caso» que tendrían consecuencias positivas para el desarrollo y aumentarían la resiliencia de los sistemas agrícolas a futuros impactos.
Bates BC, Kundzewicz ZW, Wu S, Palutikof JP, (Eds.). 2008: Climate Change and Water. Technical Paper of the Intergovernmental Panel on Climate Change. Geneva, Switzerland: IPCC Secretariat.Cambio climático y agua
http://ipcc.ch/pdf/technical-papers/climate-change-water-en.pdf
Este Documento Técnico aborda el tema del agua dulce. El aumento del nivel del mar se afronta solo en la medida en que pueda tener impactos sobre el agua dulce en áreas costeras y tierra adentro. Los sistemas socioeconómicos, biofísicos, hídricos (de agua dulce) y climáticos están interconectados entre sí de manera compleja. Por lo tanto, un cambio en cualquiera de ellos puede inducir un cambio en cualquier otro. Los factores relacionados con el agua dulce son críticos en la determinación de vulnerabilidades regionales y sectoriales. En consecuencia, la relación entre el cambio climático y los recursos de agua dulce son de capital interés para la sociedad humana y también tiene repercusiones para todas las demás especies. El artículo analiza cambios climáticos observados y proyectados concernientes al agua, tanto respecto a impactos como a posibles respuestas. Además, cubre el tema del cambio climático y los recursos hídricos en diversos sistemas, sectores y regiones. Por otra parte, evalúa medidas de mitigación del cambio climático en cuanto al agua. Finalmente, presenta implicaciones concernientes a políticas y desarrollo sostenible y discute brechas de conocimiento.
Hoanh, C.T., Smakhtin, V., Johnston, T. (Eds.) 2016: Climate change and agricultural water management in developing countries. CABI Climate Change Series, Colombo, Sri LankaCambio climático y manejo agrícola del agua en países en desarrollo.
http://www.cabi.org/bookshop/book/9781780643663
El libro proporciona un análisis de los impactos del cambio climático sobre el agua para la agricultura y las estrategias de adaptación del manejo del agua para hacer frente a dichos impactos. Los capítulos incluyen una evaluación a nivel global con detalles de los impactos en varios países. Se presentan medidas de adaptación, incluido el manejo de aguas subterráneas, almacenamiento de agua, riego a pequeña y gran escala para agricultura y acuicultura. También se examinan las implicaciones del aumento en el nivel del mar como consecuencia del cambio climático.
Video: Alternate wetting and drying (AWD)--using less water to grow rice.Vídeo: Alternancia humectación/secado (AWD): menor consumo de agua en la producción de arroz.
https://www.youtube.com/watch?v=tfKWKfagfFs
En todo el mundo, el agua se está volviendo un bien muy preciado, pues más y más personas la utilizan en el hogar, la industria y la actividad agropecuaria. Debido a que casi la mitad de la población mundial depende del arroz como alimento básico, este cultivo es el que más agua consume en el sector agrícola. Para el 2025, de 15 a 20 millones de hectáreas de arroz bajo riego padecerán escasez de agua. Para afrontar ese desafío, los científicos del Instituto Internacional de Investigaciones sobre el Arroz han desarrollado una técnica denominada alternancia humectación/secado (AWD, por sus siglas en inglés) con la que se consume menos agua para producir arroz. Este vídeo presenta la aplicación de AWD en campos de arroz bajo riego.
Video: Climate-friendly rice farming in the Philippines | Global Ideas.Vídeo: Producción de arroz respetuosa del clima en las Filipinas.
https://www.youtube.com/watch?v=1dvXhvnHUKw
Para más de 3 millardos de personas alrededor del mundo (50 por ciento de la población mundial) el arroz forma parte de su dieta básica. Pero no solo las cosechas de arroz son altamente vulnerables al cambio climático, también la producción de arroz es una gran fuente de emisiones de metano. Los científicos del Instituto Internacional de Investigaciones sobre el Arroz (IRRI) en las Filipinas se están esforzando por conseguir que la producción de arroz sea sostenible y estable, que tenga un impacto medioambiental mínimo y que pueda afrontar el cambio climático. El futuro de las poblaciones de muchas partes del mundo depende del éxito de sus investigaciones.
CCAFS Big Facts website
Agua:
https://ccafs.cgiar.org/bigfacts/#theme=climate-impacts-production&subtheme=water
Adaptación en el sector hídrico:
https://ccafs.cgiar.org/bigfacts/#theme=adaptation&subtheme=water
Estudios de casos
Referencias
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12
Bouman BAM, Lampayan RM, Tuong TP. 2007. Water management in irrigated rice: coping with water scarcity. Los Banos (Philippines): International Rice Research Institute.
http://books.irri.org/9789712202193_content.pdf Manejo del agua en arroz bajo riego: afrontar la escasez de agua. Alrededor del mundo, aproximadamente 79 millones de hectáreas de tierras bajas bajo riego proporcionan el 75 % del total de la producción de arroz. Tradicionalmente, el arroz de tierras bajas se cultiva en campos con lomos que se inundan continuamente, desde el establecimiento del cultivo hasta cerca de la cosecha. Se estima que el arroz de tierras bajas bajo riego recibe de 34 a 43 % del total del agua para riego mundial, o bien, de 24 a 30 % de la extracción mundial de agua dulce. Con la creciente escasez de agua se ve amenazada la sostenibilidad, producción de alimentos y servicios ecosistémicos de los campos de arroz. De modo que existe necesidad de elaborar y difundir prácticas de manejo hídrico que ayuden a los agricultores a hacer frente a la escasez de agua en entornos bajo riego. Este manual proporciona una visión general de opciones técnicas para dar respuesta a la escasez de agua. Se enfoca en aquello que los agricultores pueden hacer a nivel de campo, con una breve discusión sobre opciones de respuesta a nivel de sistema de riego. El manual se diseñó para servir de documento de soporte en la capacitación sobre el manejo del agua en la producción de arroz. Combina antecedentes científicos (posee muchas referencias bibliográficas para lectura adicional) con sugerencias prácticas para la implementación. Está dirigido hacia personas que trabajan en capacitación o extensión agrícola con conocimientos avanzados de agricultura o manejo del agua, que deseen introducir prácticas eficaces de manejo hídrico para productores de arroz (tales como miembros del personal de universidades agrícolas, científicos, operadores de riego y extensionistas). Los capítulos introductorios analizan el uso del agua y el balance hídrico en los campos de arroz y el movimiento del agua en el sistema suelo-planta y presentan los conceptos de escasez de agua y ahorro de agua. Al final se discuten las consecuencias de la escasez de agua para la sostenibilidad, impactos medioambientales y servicios ecosistémicos de los campos de arroz bajo riego. Un anexo presenta dos sencillos instrumentos para caracterizar el estado hídrico de los campos de arroz, los cuales pueden ayudar a los agricultores a aplicar tecnologías para ahorrar agua. Este manual fue desarrollado a través del Grupo de Trabajo del Agua del Consorcio de Investigación sobre el Arroz de Riego (que es cofinanciado por la Agencia Suiza para Desarrollo y Cooperación). Las secciones sobre arroz aeróbico fueron elaboradas en conjunto por el Programa de Reto Sobre Agua y Alimentos de CGIAR, a través del proyecto «Desarrollo de un Sistema Templado y Tropical de Arroz Aeróbico en Asia» (STAR, por sus siglas en inglés). Muchos colaboradores de sistemas nacionales de extensión e investigación agrícola de Asia hicieron aportes al trabajo descrito en este manual. El manual fue revisado por el Dr. Ian Willet (Centro Australiano para la Investigación Agrícola Internacional) y el Dr. Mohsin Hafeez (CSIRO Land and Water). -
13
IWMI. 2015b. Research Themes.
http://www.iwmi.cgiar.org/research/research-themes/ Temas de Investigación. Este sitio web brinda acceso a los principales ámbitos de investigación del IWMI: servicios ecosistémicos; gobernanza, género y pobreza; recuperación de recursos, calidad del agua y salud; sistemas de riego revitalizados; manejo agrícola sostenible del agua y disponibilidad de agua, riesgo y resiliencia. -
14
Nicol A, Langan S, Victor M, Gonsalves J, (Eds.). 2015. Water-smart agriculture in East Africa. Colombo, Sri Lanka: International Water Management Institute (IWMI).
http://dx.doi.org/10.5337/2015.203 Agricultura con un uso sostenible del recurso hídrico en África oriental. Este manual de referencia está conformado por un conjunto de enfoques teóricos y prácticos agrupados en líneas generales bajo el concepto de Water-Smart Agriculture (WaSA) [Agricultura con un Uso Sostenible del Recurso Hídrico] y complementa el material sobre agricultura sostenible adaptada al clima, pero se ocupa de las incertidumbres y retos específicos en torno a la disponibilidad, acceso y uso del agua, particularmente en sistemas que dependen de la precipitación pluvial. En ese sentido, presenta a WaSA como un subconjunto de ASAC y, de alguna manera, como un punto de partida más práctico y tangible para su implementación. Muchos de los retos que enfrentan los agricultores para adaptarse e incrementar su resiliencia a un clima cambiante dentro de los paisajes está relacionado, ya sea directa o indirectamente, con el agua, desde la captación y almacenamiento de una cantidad incierta de agua de lluvia, pasando por el manejo de acuíferos que se están degradando, hasta favorecer la retención de humedad en el suelo y la eficiencia del uso del agua en los cultivos. -
15
Tuong, TP, Bouman, BAS, Mortimer, M. 2005. More Rice, Less Water – Integrated Approaches for Increasing Water Productivity in Irrigated Rice-Based Systems in Asia, Plant Prod. Sci. 8(3), 231-241.
http://www.tandfonline.com/doi/abs/10.1626/pps.8.231 Más arroz, menos agua: enfoques integrales para incrementar la productividad del agua en sistemas productivos de arroz bajo riego en Asia. La crisis hídrica está amenazando la sostenibilidad del sistema de producción de arroz bajo riego y la seguridad alimentaria en Asia. Nuestro reto es desarrollar tecnologías novedosas y sistemas de producción que permitan mantener o incrementar la producción de arroz ante la disminución de la disponibilidad de agua. Este artículo introduce principios que rigen tecnologías y sistemas para reducir el insumo de agua y aumentar la productividad hídrica, además evalúa las oportunidades que tales tecnologías y sistemas tienen a escalas espaciales desde planta a campo, a sistema de riego, hasta zonas agroecológicas. Concluimos que, si bien aumentar la productividad del arroz bajo riego con agua de la transpiración requiere de innovaciones en fitomejoramiento, muchas tecnologías pueden reducir el insumo de agua a nivel de campo e incrementar la productividad hídrica con respecto al riego e insumo total de agua. Sin embargo, la mayoría lo logra a costa de una reducción en el rendimiento. Más arroz con menos agua solo se puede conseguir cuando el manejo del agua se integra con (i) selección de germoplasma y otras prácticas de manejo del cultivo y los recursos para aumentar el rendimiento y (ii) manejo a nivel de sistema, de tal manera que el agua que se ahorra a nivel de campo se aprovecha con más eficacia para regar terrenos de secano o de baja productividad. La cantidad de agua que se puede ahorrar a nivel de sistema puede ser mucho menor de lo que se asume con cálculos de ahorro de agua a nivel de campo, porque ya existe un alto grado de reciclaje y uso conjunto de agua en muchas áreas arroceras. El impacto de la reducción del insumo de agua para la producción de arroz sobre las malezas, nutrientes, sostenibilidad y servicios medioambientales de los ecosistemas arroceros requiere mayor investigación. -
16
Sander BO, Wassmann R, Siopongco JDLC. 2016. Water-saving techniques: potential, adoption and empirical evidence for mitigating greenhouse gas emissions from rice production. CABI Climate Change Series. pp.: 193-207
https://www.researchgate.net/publication/306371960_Water-saving_techniques_potential_adoption_and_empirical_evidence_for_mitigating_greenhouse_gas_emissions_from_rice_production Técnicas de ahorro de agua: potencial, adopción y evidencia empírica para la mitigación de las emisiones de gases de efecto invernadero derivadas de la producción de arroz. -
17
Lampayan RM, Rejesus RM, Singleton GR, Bouman BAM. 2015. Adoption and economics of alternate wetting and drying water management for irrigated lowland rice. F Crop Res. 170: 95–108.
https://www.researchgate.net/publication/268751540_Adoption_and_economics_of_alternate_wetting_and_drying_water_management_for_irrigated_lowland_rice Adopción y aspectos económicos del manejo de la alternancia de humectación y secado para arroz bajo riego en tierras bajas. Para contrarrestar la creciente falta de agua para la agricultura, el Instituto Internacional de Investigaciones sobre el Arroz (IRRI, por sus siglas en inglés) y sus socios del sistema nacional de investigación y extensión (NARES, en inglés) han trabajado colaborativamente para desarrollar y promocionar la tecnología de manejo hídrico denominada «alternancia humectación/secado» (AWD, sus siglas en inglés). En este artículo analizamos los avances en el desarrollo y difusión de la AWD en varios países asiáticos y proporcionamos evidencia del alcance de su adopción e impacto económico. La AWD implica el drenaje parcial de los campos de arroz, la cual se hace regando los campos hasta lograr la profundidad deseada y luego volviendo a regar después de un tiempo, cuando el agua se ha disipado. Para orienta la implementación adecuada, se diseñó una herramienta muy sencilla, de bajo costo y de fácil uso para los agricultores: un tubo de agua perforado para el campo. Se han realizado ensayos demostrativos y capacitaciones en ocho países de Asia, con una adopción a gran escala en las Filipinas, Vietnam y Bangladés. La AWD ha reducido la utilización de agua para riego en 38 % sin disminuir los rendimientos, implementada correctamente. Los gastos de bombeo de agua y el consumo de combustible también se redujeron, por lo que los ingresos de los agricultores aumentaron: 38 % en Bangladés, 32 % en las Filipinas y 17 % en el sur de Vietnam, basándose en una comparación de sistemas productivos «con y sin» AWD. La inversión para desarrollar y difundir la tecnología AWD posee una alta tasa de retorno, con una proporción costo:beneficio de 7:1. La evidencia de los beneficios económicos en conjunto a nivel de finca compensa con creces el total de lo invertido en investigación para el desarrollo y difusión de la tecnología. Las alianzas con entidades del NARES y grupos sólidos de agricultores fueron factores fundamentales en la validación y difusión de la tecnología. La AWD también ha sido exitosamente integrada en programas nacionales de gobierno, lo cual también facilita la generalización de la adopción de esta tecnología en esos países.
Manejo del ganado
Introducción
En respuesta al crecimiento poblacional, aumento de los ingresos y patrones de consumo cambiantes, el sector ganadero experimenta un rápido crecimiento en países en vías de desarrollo. Sin embargo, es muy probable que el cambio climático tenga impactos adversos sobre la producción ganadera en las próximas décadas. Entre estos se incluye una reducción sustancial de la cantidad y calidad del pasto disponible en algunas regiones y estrés térmico para los animales. Temperaturas más altas, patrones de lluvia cambiantes y fenómenos meteorológicos extremos más frecuentes también pueden propagar dichos impactos, así como aumentar la severidad de enfermedades transmitidas por vectores y macroparásitos, junto con la aparición y difusión de nuevas enfermedades. Por fortuna, el sector brinda una serie de oportunidades para aumentar la resiliencia, a la vez que se mitiguen las emisiones y se aumente la productividad. Estas oportunidades se vinculan con varios de los demás puntos de entrada de la agricultura sostenible adaptada al clima (ASAC), especialmente aquellos que giran en torno al manejo del suelo , agua, seguros y cadenas de valor.
Su contribución a la ASAC
Existen diversas maneras en que un manejo del ganado mejorado o con modificaciones puede contribuir a la ASAC:
- Productividad: Las intervenciones enfocadas en mejorar las fuentes de alimentación animal incrementan directamente la productividad. Para ganado, los ejemplos incluyen la mejoras en el manejo del pastoreo, el uso de pastos mejorados y especies agroforestales (ver Estudio de caso 1) y el uso de suplementos nutricionales en la dieta de los animales. De manera similar, las intervenciones encaminadas a mejorar la salud animal, tales como programas de vacunación adecuados y la crianza de animales resistentes a enfermedades, también incrementarán la productividad. Otra medida clave para la productividad es el manejo del tamaño del hato y la composición de este según la edad. En sistemas estabulados, se puede aumentar la productividad con intervenciones que busquen una mayor resistencia al calor mediante el mejoramiento genético y la reducción del estrés térmico con sistemas efectivos de enfriamiento. El manejo adecuado del estiércol también puede ofrecer mejoras en la productividad tanto de cultivos como de pastos.
- Adaptación: En sistemas de pastoreo, los seguros de ganado y sistemas de alerta temprana pueden ayudar a los productores a manejar los riesgos climáticos asociados con fenómenos extremos (para aprender más sobre los seguros de ganados, vea los casos de estudio de Manejo Energético). En sistemas agropecuarios se puede aminorar el riesgo por medio de la adición y/o sustitución de las especies o razas de cultivo o de ganado que tengan más tolerancia al calor o a la sequía.
- Mitigación: Hay muchas oportunidades de mitigación vinculadas con intervenciones en la alimentación del ganado que aumenten la productividad, a la vez que disminuyan la cantidad de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) que se producen por cada kilogramo de carne y litro de leche. El mejoramiento del manejo del pastoreo también puede aumentar el secuestro del carbono en suelo, aunque existe cierta incertidumbre sobre su potencial de mitigación. También es posible reducir las emisiones mediante la compactación y cobertura del estiércol de granja, aunque las oportunidades en países en desarrollo para tales medidas por lo general son limitadas. Además, la aplicación oportuna del estiércol al campo de cultivo puede reducir las emisiones de óxido nitroso. Existen otras oportunidades, tales como el uso de aditivos para piensos que alteran la producción de metano en los rumiantes, pero, al parecer, las dificultades técnicas y de otra índole asociadas al consumo de tales aditivos permanecerán aún por un tiempo. El manejo del tamaño del hato y su composición según la edad son otras medidas clave para reducir las emisiones de GEI.
Recursos clave
Thornton PK, Herrero M. 2015. Adapting to climate change in the mixed crop and livestock farming systems in sub-Saharan Africa. Nature Climate Change 5:830–836.Adaptación al cambio climático en sistemas agropecuarios en África subsahariana.
http://dx.doi.org/10.1038/nclimate2754
Los sistemas agropecuarios son la columna vertebral de la agricultura africana, pues brindan seguridad alimentaria y opciones de sustento a cientos de millones de personas. Hoy se conoce mucho sobre los impactos del cambio climático sobre los cultivos dentro de los sistemas agropecuarios y algo, aunque menos, sobre los que tiene para el ganado. Las interacciones entre vegetales y animales se pueden manejar de manera que contribuyan a la intensificación sostenible, diversificación y manejo del riesgo. Existe relativamente poca información sobre cómo dichas interacciones pueden verse afectadas por los cambios y variabilidad del clima. Este es un vacío grave, porque esas interacciones pueden brindar alguna capacidad de amortiguamiento que ayude a los pequeños agricultores a adaptarse al cambio climático. El presente artículo revisa los avances más importantes en cuanto a ganadería y medio ambiente de los últimos cinco a ocho años. También proporciona un breve recuento del aprovechamiento de recursos por parte de la ganadería (tierra, biomasa, nitrógeno y agua), actividades de adaptación al cambio climático y desafíos de mitigación para el sector ganadero. Además, presenta opciones para reducir la huella medioambiental del ganado y brinda orientación para la construcción de una agenda de investigación para los próximos años, que ofrezca respuestas sobre el tema.
FAO. 2013. Climate-Smart Agriculture Sourcebook. Module 8: Climate-smart Livestock. Rome, Italy: Food and Agriculture Organization of the United Nations. Pp. 211-227.Manual de referencia de ASAC. Módulo 8: Ganadería Sostenible Adaptada al Clima.
http://www.fao.org/3/a-i3325e.pdf
Este módulo evalúa el papel de la ganadería en la agricultura sostenible adaptada al clima (ASAC). Desde la perspectiva de un sistema agropecuario, destaca las principales estrategias sostenibles adaptadas al clima para el sector. La primera sección describe las tendencias del sector ganadero y su contribución a la seguridad alimentaria. La segunda evalúa el impacto del cambio climático sobre el ganado e identifica necesidades de adaptación y mitigación. Además, presenta una visión de conjunto de las emisiones derivadas de la ganadería. Este módulo esboza los principios de una ganadería sostenible adaptada al clima enfocada en una mayor eficiencia en el aprovechamiento de los recursos y creación de resiliencia. La última sección permite comprender las estrategias principales para alcanzar una ganadería sostenible adaptada al clima y abarca sistemas con terreno, sin terreno y mixtos.
Andeweg K, Reisinger A. 2014. Reducing greenhouse gas emissions from livestock: Best practice and emerging options. Global Research Alliance on Agricultural Greenhouse Gases and SAI Platform.Reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero del ganado: mejores prácticas y opciones emergentes.
http://www.saiplatform.org/uploads/Modules/Library/lrg-sai-livestock-mitigation_web2.pdf
La ganadería cumple una función importante en cuanto al cambio climático. Se estima que los sistemas ganaderos, tomando en cuenta su consumo de energía y cambio en el uso de la tierra a lo largo de la cadena productiva, fueron responsables del 14.5 % de las emisiones globales de gases de efecto invernadero (GEI) derivadas de actividades antropogénicas en 2010. Más de la mitad de dichas emisiones (alrededor de 65 %) son del ganado bovino. Las emisiones directas de la ganadería y la producción de forraje constituyen un 80 % del total de las emisiones derivadas de la actividad agropecuaria y, por tanto, necesitan formar parte de cualquier iniciativa que busque reducir la contribución de la producción de alimentos al cambio climático global.
CCAFS Big Facts website
Emisiones agropecuarias derivadas directamente del ganado:
https://ccafs.cgiar.org/bigfacts/#theme=food-emissions&subtheme=direct-agriculture
Ganadería:
https://ccafs.cgiar.org/bigfacts/#theme=adaptation&subtheme=livestock
Evidencia del éxito alcanzado en ganadería:
https://ccafs.cgiar.org/bigfacts/#theme=evidence-of-success&subtheme=livestock&csSubtheme=true
Estudios de caso
Silvicultura y agrosilvicultura
Introducción
La silvicultura y la agrosilvicultura cumplen una función importante dentro de los esfuerzos globales para hacer frente al cambio climático. Los bosques albergan a cerca de 60 millones de indígenas (FAO 2013b), 18 y brindan sustento a muchos más prestándoles una serie de servicios ecosistémicos (alimento, combustible, agua, secuestro de carbono, biodiversidad, etc.). Por ejemplo, la FAO estima que 2.4 millardos de personas cocinan utilizando madera como combustible y que la dendroenergía (combustibles de madera) es una fuente importante de energía primaria en los países en vías de desarrollo (FAO 2014c). 19 El cambio climático amenaza el suministro de servicios ecosistémicos y, en consecuencia, puede afectar los medios de subsistencia en el área rural. El sector agropecuario, forestal y otros usos de la tierra son responsables de un cuarto de las emisiones globales. Los bosques y los árboles de las fincas son un importante sumidero de carbono y este potencial se puede incrementar a través de iniciativas de forestación. La deforestación es la mayor causante de las emisiones del sector forestal y la actividad agropecuaria sigue siendo el principal motor de la deforestación.
IPara los pequeños productores de países en desarrollo, a menudo sus fincas y los bosques forman parte de paisajes rurales complejos, que en conjunto satisfacen las necesidades de subsistencia de la población rural. Esto quiere decir que los esfuerzos encaminados hacia una agricultura sostenible adaptada al clima (ASAC) deberían adoptar enfoques integrales al momento de formular las intervenciones. Algunas de las posibles intervenciones comprenden el incrementar la resiliencia de los sistemas forestales para mantener y mejorar el flujo de los servicios ecosistémicos, mitigar las emisiones del sector mediante la reducción de la deforestación y el aumento de la cubierta forestal, pero es necesario considerarlas dentro del contexto más amplio del paisaje (Locatelli et al. 2015). 20 Las iniciativas de Manejo Forestal Sostenible (MFS) en curso brindan una base sólida para acciones a realizar en el sector y la silvicultura sostenible adaptada al clima implicará una aplicación más amplia de los principios de MFS (FAO 2013b). 18 El fortalecimiento de capacidades dentro de las instituciones locales y el fortalecimiento del proceso de gobernanza también serán una prioridad dentro del sector (ibíd.). La REDD+ (Reducción de Emisiones de la Deforestación y Degradación Forestal), que es un enfoque desarrollado más recientemente para la protección de los bosques, aún necesita ir más allá de la estructura de incentivos y pagos para enfrentar los impulsores de origen agropecuario de la deforestación, tales como la falta de institucionalidad y gobernanza, la baja rentabilidad del aprovechamiento forestal, la carencia de derechos de usuarios locales y regímenes inadecuados de tenencia de la tierra (Matthews et al. 2014, 21 Kissinger 2011). 22
Su contribución a la ASAC
Las acciones en el sector forestal y de agrosilvicultura pueden contribuir a los tres pilares de la ASAC:
- Productividad: La producción de servicios ecosistémicos, incluidos los servicios de suministro (alimento, fibra, combustible, etc.), puede mejorar si se utiliza un enfoque de ASAC. Por ejemplo, con la adopción de prácticas agroforestales en las fincas, los agricultores pueden cosechar productos de los árboles, complementar su dieta y crear nuevas fuentes de ingreso. Al incorporar árboles a los sistemas agropecuarios también es posible mejorar la calidad del suelo, lo cual representa mejores rendimientos, más estables. De manera similar, un MFS suma más productos a la cartera productiva de pequeños agricultores en comunidades donde, por ejemplo, se les otorgan concesiones por la producción de madera y productos forestales no madereros.
- Adaptación: Los ecosistemas sanos y con mayor diversidad son más resilientes a los peligros naturales. Dentro de las fincas, los árboles se pueden utilizar como cinturones protectores y rompevientos, además de que cumplen una función importante en la protección contra deslizamientos, inundaciones y aludes. Los árboles también estabilizan las riberas y mitigan la erosión del suelo. Las prácticas agroforestales aumentan la capacidad de absorción del suelo y reducen la evapotranspiración. Además, la copa de los árboles puede tener beneficios directos: reducción de la temperatura del suelo para los cultivos que crecen abajo y la reducción de la velocidad de la escorrentía y de la erosión del suelo causada por la precipitación (De Leeuw et al. 2014). 23
- Mitigación: Todas aquellas acciones que incrementan la cubierta forestal (forestación, reforestación y agrosilvicultura) y reducen la deforestación y la degradación, incrementan el secuestro de carbono mediante el aumento de la biomasa tanto sobre la superficie del suelo como debajo de esta.
Recursos clave
Chandrasekharan D, Labbate G, Verchot L. 2014. Forests and climate change. Background Brief. Global Landscapes Forum.Los bosques y el cambio climático.
http://www.landscapes.org/wp-content/uploads/2014/documents/GLF_Brief_02_landscapes.pdf
El artículo brinda un informe integral de los temas y debates actuales en materia de silvicultura, en el contexto del cambio climático. Los temas que se abarcan incluyen: mejor manejo de tierras agrícolas, bosques y árboles; acciones tanto en el sector agropecuario como forestal que pueden contribuir a reducir las emisiones, aumentar la resiliencia y reducir la vulnerabilidad de las poblaciones rurales alrededor del mundo; cambios en el uso de la tierra para la producción agropecuaria, incluida la deforestación tropical; la contribución de los bosques al secuestro de carbono y la mitigación de las emisiones, etc.
Mbow C, Neufeldt H, Minang PA, Luedeling E, Kowero G. 2014. Sustainability challenges. Special Issue. Current Opinion in Environmental Sustainability 6:1-170.Desafíos de la sostenibilidad.
http://www.sciencedirect.com/science/journal/18773435/6/supp/C
Este número especial consolida y celebra una generación de investigación en agrosilvicultura, con particular referencia a África. La agrosilvicultura ha surgido como un sistema de estudio en una era donde la investigación sobre los sistemas ha ido más allá del enfoque agronómico para abarcar una visión más integral del sistema socioecológico. De manera que el ámbito de estudio de este número es mucho más que la producción y la ecología. Reconoce y explora ejemplos del flujo profundo e interactivo de las influencias recíprocas entre los aspectos humanos y medioambientales de la generación de medios de subsistencia a escala local y regional. De hecho, África enfrenta serios desafíos de seguridad alimentaria, del agua y energética, equidad y pobreza y degradación ambiental. En el contexto de la generación de medios de subsistencia en el área rural de África para cerca del 70 % de su millardo de habitantes, la agrosilvicultura puede ayudar a hacer frente a todos estos desafíos.
FAO. 2013. Climate change guidelines for forest managers. FAO Forestry Paper No. 172. Rome, Italy: Food and Agriculture Organization of the United Nations.Directrices sobre cambio climático para gestores forestales.
http://www.fao.org/3/i3383e.pdf
La presente publicación proporciona una orientación sobre lo que los gestores forestales deben considerar en la evaluación de la vulnerabilidad, el riesgo, las opciones de mitigación y acciones de adaptación, mitigación y seguimiento en respuesta al cambio climático. Las acciones recomendadas para la adaptación al cambio climático abordan los impactos en: productividad de los bosques, la biodiversidad, la disponibilidad y calidad del agua, los incendios, las plagas y enfermedades, los fenómenos meteorológicos extremos, el aumento del nivel del mar, y las consideraciones económicas, sociales e institucionales. Además, se proporciona una serie de actividades de mitigación, así como orientación sobre el seguimiento y la evaluación adicional que puede ser necesaria en los bosques ante el cambio climático.
CCAFS Big Facts website
Emisiones de la silvicultura y el uso de la tierra:
https://ccafs.cgiar.org/bigfacts/#theme=food-emissions&subtheme=indirect-agriculture
Silvicultura y el uso de la tierra:
https://ccafs.cgiar.org/bigfacts/#theme=mitigation&subtheme=indirect-emissions
Bosques y paisajes:
https://ccafs.cgiar.org/bigfacts/#theme=adaptation&subtheme=forests
Estudios de caso
Referencias
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FAO. 2013b. Climate change guidelines for forest managers. FAO Forestry Paper No. 172. Rome, Italy: Food and Agriculture Organization of the United Nations.
http://www.fao.org/3/i3383e.pdf Directrices sobre cambio climático para gestores forestales. La presente publicación proporciona una orientación sobre lo que los gestores forestales deben considerar en la evaluación de la vulnerabilidad, el riesgo, las opciones de mitigación y acciones de adaptación, mitigación y seguimiento en respuesta al cambio climático. Las acciones recomendadas para la adaptación al cambio climático abordan los impactos en: productividad de los bosques, la biodiversidad, la disponibilidad y calidad del agua, los incendios, las plagas y enfermedades, los fenómenos meteorológicos extremos, el aumento del nivel del mar, y las consideraciones económicas, sociales e institucionales. Además, se proporciona una serie de actividades de mitigación, así como orientación sobre el seguimiento y la evaluación adicional que puede ser necesaria en los bosques ante el cambio climático. -
19
FAO. 2014c. State of the World’s Forests Enhancing the socioeconomic benefits from forests. Rome, Italy: Food and Agriculture Organization of the United Nations.
http://www.fao.org/3/a-i3710e.pdf Estado de los bosques del mundo. Potenciar los beneficios socioeconómicos de los bosques. Esta edición de la publicación de la FAO El estado de los bosques del mundo viene a colmar, mediante la recopilación y el análisis de datos, una carencia de conocimientos esencial sobre los beneficios socioeconómicos de los bosques que, hasta la fecha, no habían sido objeto de un análisis sistemático. En el primer capítulo se establece el contexto y la finalidad del informe. En el Capítulo 2 se expone lo que se sabe actualmente sobre los beneficios socioeconómicos de los bosques. En el Capítulo 3 se presentan los datos recopilados para el informe, así como resultados de análisis que muestran de qué forma contribuyen los bosques al bienestar humano. En el Capítulo 4 se describen las políticas y medidas que han adoptado los países para respaldar o potenciar la obtención de estos beneficios. En el último capítulo se resumen los resultados del examen y se formulan algunas recomendaciones sobre la manera en que podría consolidarse, en el futuro, la vinculación entre las políticas y los beneficios. -
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Locatelli, Pavageau C, Pramova E, Di Gregorio M. 2015. Integrating Climate Change Mitigation and Adaptation in Agriculture and Forestry: Opportunities and Trade-offs. WIREs Climate Change 6(6):585-598.
http://dx.doi.org/10.1002/wcc.357 Incorporación de mitigación y adaptación al cambio climático en agricultura y silvicultura: oportunidades y disyuntivas. Aunque muchas actividades pueden contribuir en conjunto a las estrategias de adaptación y mitigación del cambio climático, por lo general las políticas climáticas han tratado estas estrategias por separado. En años recientes, ha habido un creciente interés de parte de especialistas en agricultura, silvicultura y manejo de paisajes en la vinculación entre ambas estrategias. Esta investigación examina las oportunidades y disyuntivas al manejar paisajes tanto para mitigar como para adaptarse al cambio climático; se señalan diversas conceptualizaciones de los vínculos entre adaptación y mitigación. Bajo la primera conceptualización de «resultados conjuntos», varios estudios analizan cómo actividades sin objetivos climáticos producen resultados conjuntos de adaptación y mitigación. Una segunda conceptualización de «efectos secundarios involuntarios» se enfoca en cómo actividades dirigidas hacia un solo objetivo climático, ya sea adaptación o mitigación, puede generar resultados para el otro objetivo. Una tercera conceptualización de «objetivos conjuntos» resalta que asociar objetivos de adaptación y mitigación en una actividad relacionada con el clima puede influir en sus resultados, debido a las múltiples interacciones posibles. La revisión evidencia una diversidad de razones por las cuales incorporar la adaptación, ya sea separada o asociada a la mitigación, en el manejo de paisajes. Las tres conceptualizaciones generales de la vinculación entre adaptación y mitigación sugieren diferentes implicaciones para la incorporación e integración de la política climática. -
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Matthews RB et al. 2014. Implementing REDD+ (Reducing Emissions from Deforestation and Degradation): Evidence on Governance, Evaluation and Impacts from the REDD-Alert project. Mitigation and Adaptation Strategies for Global Change 19(6):907–925.
http://dx.doi.org/10.1007/s11027-014-9578-z Implementación de REDD+ (Reducción de Emisiones de la Deforestación y Degradación Forestal): evidencia de gobernanza, evaluación e impactos del proyecto REDD-ALERT. El proyecto REDD-ALERT (siglas en inglés de Reducción de Emisiones de la Deforestación y Degradación Forestal a través de los Usos Alternativos de la Tierra en las Selvas de los Trópicos) comenzó en el año 2009 y terminó en el 2012. Su finalidad era evaluar mecanismos que tradujeran los acuerdos a nivel internacional en instrumentos que ayudaran a cambiar el comportamiento de los usuarios de la tierra y al mismo tiempo minimizaran las repercusiones negativas para su subsistencia. Los hallazgos encontraron que algunos países tropicales en vías de desarrollo han pasado recientemente por una transición forestal, por lo tanto una reducción de sus bosques, su situación cambió a una expansión de estos a nivel nacional. Sin embargo, en la mayoría (p. ej. Vietnam), una parte importante de dicho aumento en la cobertura forestal está asociada con un incremento de las importaciones de alimentos y productos madereros del extranjero, lo cual representa una fuga de reservas de carbono a través de las fronteras internacionales. Evitar la deforestación y recuperar los bosques requerirá de una mezcla de enfoques regulatorios, instrumentos basados en mercados emergentes, opciones convincentes y medidas híbridas de manejo. El trabajo de análisis de políticas y elaboración de modelos mostró un alto grado de complejidad a nivel local y señaló la necesidad de tomar en cuenta esta heterogeneidad, pues es poco probable que haya un enfoque adecuado para todos que logre que la Reducción de Emisiones de la Deforestación y Degradación Forestal (REDD+) funcione. Se logró un avance significativo en la cuantificación del flujo de carbono y gases de efecto invernadero (GEI) luego del cambio en el uso de la tierra en los trópicos, lo cual contribuye a reducir los intervalos de confianza para las emisiones de las turberas y sus estándares de notificación. Hay indicios de que solo existe una pequeña ventana de oportunidad de lograr que REDD+ funciones, entre ellos, el hecho de que las emisiones relacionadas con los bosques, como fracción del total de emisiones de GEI, han disminuido a lo largo del tiempo por el incremento en las emisiones de los combustibles fósiles y que la rentabilidad de REDD+ puede ser mucho menor de lo que se pensó originalmente, debido a la necesidad de incorporar costos de salvaguardias, de transacción y de monitoreo. No obstante, REDD+ ha creado conciencia sobre los bosques del mundo y los factores que los afectan. Los avances futuros deberían contribuir al surgimiento de nuevos enfoques basados en paisajes para proteger un mayor rango de servicios ecosistémicos. -
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Kissinger G. 2011. Linking forests and food production in the REDD+ context. CCAFS Policy Brief 3. Copenhagen, Denmark: CGIAR Research Program on Climate Change, Agriculture and Food Security (CCAFS).
https://cgspace.cgiar.org/rest/bitstreams/15412/retrieve Vinculación de bosques y producción de alimentos dentro del contexto REDD+. Ese Informe de Políticas resume hallazgos clave del informe «Vinculación de bosques y producción de alimentos en un contexto de REDD+». El informe evaluó hasta qué punto los países que participan de las actividades de preparación del Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques (FCPF) del Banco Mundial están vinculando activamente la REDD+ a las políticas y programas agropecuarios y a las disposiciones institucionales y de gobernanza. El análisis se basa en 20 Propuestas de Preparación para REDD+ (R-PP) que presentaron los países al FCPF. -
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De Leeuw J, Njenga M, Wagner B, Iiyama M, (Eds.). 2014. Tree resilience: An assessment of the resilience provided by trees in the drylands of Eastern Africa. Nairobi, Kenya: World Agroforestry Center (ICRAF).
http://www.worldagroforestry.org/downloads/Publications/PDFS/B17611.pdf Resiliencia de los árboles: evaluación de la resiliencia que brindan los árboles en las tierras áridas de África oriental. Este libro es el resultado de un proceso de consulta que reunió a expertos de África oriental y otras partes para resumir y compilar la información existente sobre la función de los árboles en la creación de resiliencia en las tierras áridas de la región. El grupo estuvo conformado por una mezcla de expertos con experiencia en investigación, la academia, el gobierno, así como agricultores y especialistas en desarrollo; el libro refleja el conocimiento y puntos de vista de este variado grupo. Comienza con la justificación de la iniciativa, a la cual sigue una explicación de los antecedentes y el enfoque adoptado. El tercer capítulo describe la región oriental de África y plantea la razón por la que se necesita crear resiliencia en los medios de vida de las comunidades que viven en las tierras áridas. El capítulo cuatro profundiza en ello introduciendo la perspectiva de los servicios ecosistémicos, como marco conceptual para analizar la resiliencia que ofrecen los árboles. El quinto capítulo realiza una revisión de la ecología, distribución y uso de los árboles a lo largo de la región oriental de África. El capítulo seis utiliza la perspectiva de los servicios ecosistémicos para revisar los distintos beneficios que la población obtiene de los árboles de las tierras áridas. El séptimo capítulo se basa en las experiencias adquiridas en el desarrollo de prácticas y presenta la revisión de 11 estudios de caso sobre el manejo de recursos naturales. El capítulo ocho presenta reflexiones de los participantes sobre cómo se pueden escalar las mejores prácticas y la creación de resiliencia. En el noveno capítulo se presenta una revisión de las brechas de conocimiento e información respecto a la contribución de los árboles en la creación de resiliencia; luego, en el capítulo diez, sigue un plan de posibles acciones para el seguimiento de actividades.
Pesca de captura y acuicultura
Introducción
La pesca de captura y la acuicultura contribuyen a la subsistencia de 660 a 820 millones de personas. Con una producción de más de 150 millones de toneladas de pescado por año, de las cuales el 85 por ciento se consume como alimento, el sector proporciona proteínas y nutrientes esenciales a 4.3 millardos de personas en todo el mundo. Actualmente, el sector genera más de USD 218 millardos en primera venta y los productos pesqueros se encuentran entre los alimentos más comercializados del mundo; más del 37 % de la producción se comercializa internacionalmente (FAO 2012c). 24 Es más, la acuicultura es el sistema de producción de alimentos de más rápido crecimiento, pues se está expandiendo a un ritmo de 7 % anual, por lo que se espera que estas cifras aumenten en el futuro. Sin embargo, los cambios climáticos actuales y proyectados amenazan tanto la productividad como la subsistencia de aquellos que dependen de este sector.
- Comunidades costeras: Los cambios en la acidez del océano y la temperatura están causando serias perturbaciones en los ciclos biológicos de las especies marinas, así como en sus patrones migratorios y cadenas alimenticias, lo cual está ocasionando la reducción de las poblaciones de peces y cambios globales en el desplazamiento de los peces. Otro potencial efecto es la pérdida de la biodiversidad por la extinción de especies de pescado endémicas o especializadas. Además, fenómenos meteorológicos extremos cada vez más frecuentes, en combinación con la lenta elevación del nivel del mar y un aumento en la salinidad, amenazan la infraestructura pesquera y acuícola que se encuentra a lo largo de la zona costera (Ficke et al. 2007). 25
- Comunidades del interior: Patrones cambiantes de lluvia y la escasez de agua están afectando la pesca y la producción acuícola en ríos y lagos. Asimismo, mayor irregularidad en las precipitaciones y fenómenos meteorológicos extremos están ocasionando que se den sequías e inundaciones con más frecuencia, lo cual altera el ritmo de los procesos de erosión del suelo y sedimentación, afectando muy negativamente a ríos y cuerpos de agua en general (FAO 2013a). 26
Su contribución a la ASAC
- Productividad: Incrementarán la productividad todas aquellas innovaciones que (i) mejoren el manejo de la pesca costera, continental y los ecosistemas acuícolas y (ii) aumenten la eficiencia mediante una intensificación sostenible de la producción con sistemas más integrados, poblaciones mejoradas y menos pérdidas por enfermedades.
- Adaptación mediante la gestión de los riesgos climáticos: Existe una gran variedad de posibilidades para dar respuesta a los riesgos del clima (ver Cuadros 10.1 a 10.3, páginas 257-262 en FAO 2013a). 26 Los ejemplos de prácticas de adaptación en materia de pesca de captura incluyen el acceso a mercados de mayor valor para compensar por la reducción en el rendimiento, diversificación de los medios de subsistencia para reducir el impacto de la variabilidad de los rendimientos, estrategias flexibles de captura que tomen en cuenta los cambios en la distribución de los peces, sistemas de alerta meteorológica para reducir los peligros de la actividad pesquera y nuevas barreras físicas o biológicas para amortiguar los efectos de los cambios en el nivel del mar y marejadas ciclónicas. Aunque la acuicultura a menudo es vista en sí como una estrategia de adaptación contra los riesgos del clima que afectan la pesca marítima o la piscicultura, esta también requiere adaptarse al cambio climático. Ejemplos de ello incluyen mejoras en la infraestructura y pronósticos del tiempo para reducir el impacto de más fenómenos meteorológicos extremos, selección y mejoramiento genético para contrarrestar el impacto del calentamiento global y de un alto índice de enfermedades, así como sistemas de producción de ciclo corto y de aguas compartidas contra una mayor incidencia de sequías.
- Mitigación: Alrededor de un 30 % de las emisiones anuales son secuestradas por ecosistemas marinos, especialmente manglares, algas marinas, bosques aluviales, sedimentos costeros (conocidos como «carbono azul»); por tanto, es importante detener la perturbación del proceso de secuestro de carbono que causa la destrucción de los hábitats costeros (Nellemann et al 2009). 27 Asimismo, existen posibilidades de facilitar el secuestro de carbono por medio de la expansión del área sembrada con manglares y bosques aluviales. La reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) también se puede lograr a través de la regulación del combustible que usan las flotas pesqueras mediante una asignación flexible de cuotas.
Recursos clave
Barange M, Merino G, Blanchard JL, Scholtens J, Harle J, Allison EH, Allen JI, Holt J, Jennings S. Impacts of climate change on marine ecosystem production in societies dependent on fisheries. Nature Climate Change 4:211–216.Impactos del cambio climático sobre la producción de ecosistemas marinos en sociedades que dependen de la pesca.
http://dx.doi.org/10.1038/nclimate2119
Los autores desarrollaron y vincularon modelos de respuesta física, biológica y humana al cambio climático en 67 zonas económicas exclusivas marinas nacionales, que producen aproximadamente el 60 % de la pesca mundial, para proyectar los impactos del cambio climático sobre el rendimiento en países con diferentes niveles de dependencia de la pesca marina. El artículo también evalúa la pertinencia social de esos resultados mediante el análisis de países individuales que dependen de su sector pesquero en términos de seguridad alimentaria y de subsistencia, así como de la demanda global esperada de productos pesqueros para una población mundial en aumento.
FAO. 2013. Climate-Smart Agriculture Sourcebook. Module 10: Climate-smart fisheries and aquaculture. Rome, Italy: Food and Agriculture Organization of the United Nations. Pp. 241-271.Manual de referencia de ASAC. Módulo 10: Pesca y acuicultura sostenibles adaptadas al clima.
http://www.fao.org/3/a-i3325e.pdf
Este módulo aborda el concepto de Agricultura Sostenible Adaptada al Clima desde la perspectiva del sector pesquero y acuícola. Estructurado en seis secciones, el módulo brinda un panorama general de las contribuciones hechas por el sector pesquero y acuícola, las rutas de impacto del cambio climático que están afectando al sector y las vulnerabilidades que actualmente menoscaban la resiliencia de los sistemas acuáticos. El enfoque ecosistémico de la pesca y la acuicultura (EAF/EAA) se presenta como el enfoque base para desarrollar una pesca y acuicultura sostenible adaptada al clima. Las acciones que respaldan este enfoque son: el aumento sostenible de la productividad y eficiencia dentro del sector; reducción de la vulnerabilidad del sector e incremento de su resiliencia al cambio y disminución y remoción de gases de efecto invernadero (GEI) desde dentro del sector. El módulo presenta opciones que apoyan acciones en diversos niveles (nacional, regional, subsectorial, de empresa individual y de comunidad). El módulo concluye con una evaluación de los avances del sector hacia una ASAC y los elementos que brindan soporte para el éxito de la transición a ASAC. El módulo recurre al uso de recuadros para proporcionar ejemplos concretos de acciones y enfoques de ASAC.
OECD. 2010. The Economics of Adapting Fisheries to Climate Change. OECD Publishing.Los aspectos económicos de la adaptación de la pesca al cambio climático.
http://dx.doi.org/10.1787/9789264090415-en
El informe destaca los aspectos económicos y políticos de la adaptación del sector pesquero al cambio climático. Brinda recomendaciones específicas a los responsables de las políticas sobre pesca que necesitan diseñar estrategias de adaptación que tomen en cuenta las consecuencias económicas del cambio climático. Entre otros, discute la manera cómo: fortalecer la gobernanza global de la pesca; comunicarse abiertamente con las partes interesadas, incluido el público en general, sobre la manera en que el cambio climático afectará la pesca; extender el uso de sistemas de gestión basados en los derechos; proteger los ecosistemas; poner fin a los subsidios perjudiciales para el medio ambiente; enfocarse en la acuicultura y en la demanda de mariscos capturados de manera sostenible. Finalmente, presenta tres estudios de caso sobre pesca y cambio climático en el Reino Unido, Corea del Sur y Taiwan, China.
Cochrane K, De Young C, Soto D, Bahri T, (Eds.). 2009. Climate change implications for fisheries and aquaculture: overview of current scientific knowledge. FAO Fisheries and Aquaculture Technical Paper no. 530. Rome, Italy: Food and Agriculture Organization of the United Nations.Consecuencias del cambio climático para la pesca y la acuicultura: visión general del estado actual de los conocimientos científicos FAO. Documento Técnico de Pesca y Acuicultura.
http://www.fao.org/docrep/012/i0994e/i0994e00.htm
El informe presenta una visión general del estado actual de los conocimientos científicos disponibles sobre las consecuencias del cambio climático para la pesca y la acuicultura. Esta se presenta por medio de tres estudios técnicos presentados y discutidos en el Taller de expertos sobre las consecuencias del cambio climático para la pesca y la acuicultura (Roma, 7-9 de abril de 2008). La Introducción de documento técnico presenta un resumen de los resultados del taller y las conclusiones sobre los efectos del cambio climático en los ecosistemas acuáticos y en los medios de vida relacionados con la pesca y la acuicultura.
El primer estudio examina las repercusiones físicas y ecológicas del cambio climático en las pesquerías de captura marina y continental y en la acuicultura. El estudio comienza con una revisión de los efectos físicos del cambio climático en los sistemas marinos y de aguas dulces para luego relacionar estos cambios con los efectos observados en los procesos de producción pesquera. Partiendo de estudios de caso realizados en diferentes regiones y ecosistemas, se bosquejan diversas hipótesis referidas a las consecuencias del cambio climático para la producción pesquera y los ecosistemas.
El segundo estudio se ocupa de los efectos del cambio climático en las pesquerías y comunidades pesqueras analizando la exposición, susceptibilidad y vulnerabilidad de las pesquerías y proponiendo algunos ejemplos de mecanismos de adaptación actuales a que se ha recurrido en el sector. Se examina la contribución de las actividades pesqueras a las emisiones de gases de efecto invernadero y se sugieren ejemplos de estrategias de mitigación. También se investiga el papel de la política pública y de las instituciones en la promoción de las medidas de adaptación al cambio climático y de mitigación de sus efectos.
CCAFS Big Facts website
Pesca y acuicultura:
https://ccafs.cgiar.org/bigfacts/#theme=climate-impacts-production&subtheme=fisheries
Pesca:
https://ccafs.cgiar.org/bigfacts/#theme=adaptation&subtheme=fisheries
Evidencia del éxito alcanzado en pesca y acuicultura:
https://ccafs.cgiar.org/bigfacts/#theme=evidence-of-success&subtheme=fisheries&csSubtheme=true
Estudios de caso
Referencias
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FAO. 2012c. The state of world fisheries and aquaculture. Rome, Italy: Food and Agriculture Organization of the United Nations.
http://www.fao.org/docrep/016/i2727e/i2727e00.htm El estado mundial de la pesca y la acuicultura. En el momento presente, la comunidad mundial se enfrenta a múltiples retos relacionados entre sí, que van desde los efectos de la crisis financiera y económica actual a una mayor vulnerabilidad al cambio climático y los fenómenos meteorológicos extremos. Al mismo tiempo, debe atender las necesidades apremiantes relacionadas con la alimentación y la nutrición de una población creciente con recursos naturales finitos. La presente edición de El estado mundial de la pesca y la acuicultura muestra cómo estas cuestiones afectan a la pesca y la acuicultura y cómo el sector trata de enfrentarse a ellas de forma sostenible. -
25
Ficke AD, Myrick CA, Hansen LJ. 2007. Potential impacts of global climate change on freshwater fisheries. Reviews in Fish Biology and Fisheries 17(4):581–613.
http://dx.doi.org/10.1007/s11160-007-9059-5 Impactos potenciales del cambio climático mundial sobre la pesca de agua dulce. A pesar de la incertidumbre que existe en todos los niveles de análisis, los cambios en el clima, recientes y a largo plazo, indican que existe una alta probabilidad de que las emisiones de gases de efecto invernadero hayan alterado las temperaturas medias anuales, las precipitaciones y los patrones meteorológicos. Los modelos que utilizan escenarios con doble concentración de CO2 en la atmósfera predicen un incremento de la temperatura media global de 1 a 7 °C, cambios regionales en los patrones de lluvia y en las trayectorias de las tormentas, así como la ocurrencia de «sorpresas» o cambios repentinos e irreversibles de régimen. Es muy probable que los efectos generales del cambio climático en los sistemas de agua dulce sean el incremento de la temperatura del agua, reducción de los niveles de oxígeno disuelto y una mayor toxicidad de los contaminantes. En los sistemas lóticos, la alteración de los regímenes hidrológicos y el incremento de la temperatura de las aguas subterráneas podrían afectar la calidad de los hábitats de los peces. En los sistemas lénticos, la eutrofización se puede ver acrecentada o compensada y es posible que la estratificación se vuelva más pronunciada. Ello podría alterar las redes alimentarias y cambiar la disponibilidad y calidad de los hábitats. La fisiología de los peces está estrechamente vinculada con la temperatura y los peces han evolucionado para vivir bajo regímenes hidrológicos y nichos específicos. Así pues, su fisiología e historia de vida se verá afectada por las alteraciones inducidas por el cambio climático. Las comunidades de peces pueden cambiar en la medida en que los desplazamientos de distribución se den a nivel de especie, no a nivel de comunidad; esto añadirá nuevas presiones bióticas a las comunidades acuáticas. El cambio genético también es posible y es la única opción biológica para aquellos peces que no pueden migrar o ambientarse. Las especies endémicas, especies en hábitats fragmentados o aquellas en sistemas orientados de este a oeste tendrán menos capacidad de seguir las isolíneas térmicas a lo largo del tiempo. En todo el mundo, tanto la pesca artesanal como la comercial y la recreativa dependen de los peces de agua dulce. Si la pesca se ve impactada, los países en desarrollo pueden tener dificultades para satisfacer su demanda de alimento y los países desarrollados, enfrentar pérdidas económicas. A medida que el cambio climático global se consolide en el tiempo, ejercerá cada vez más presión sobre los peces que viven en sistemas naturales o artificiales. Es más, la respuesta de los seres humanos al cambio climático (p.ej. trasvase de aguas) agravará aún más lo perjudicial de sus efectos. Las predicciones de los modelos indican que el cambio climático global continuará aún si las emisiones de gases de efecto invernadero disminuyen o cesan por completo. Es por eso que será necesario adoptar estrategias proactivas de gestión, tales como la eliminación de otros factores de presión de los sistemas naturales, para que el sector pesquero se sostenga. -
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FAO. 2013a. Climate-Smart Agriculture: Sourcebook. Rome, Italy: Food and Agriculture Organization of the United Nations.
http://www.fao.org/3/a-i3325e.pdf Agricultura Sostenible Adaptada al Clima: Manual de referencia. De aquí al año 2050, la población mundial crecerá un tercio. La mayoría de estos dos mil millones de nuevos habitantes vivirá en países en desarrollo. Al mismo tiempo, la mayor parte lo hará en ciudades. La FAO estima que, si persisten las tendencias actuales de crecimiento de ingresos y consumo, la producción agrícola tendrá que aumentar un 60 % para 2050 con el fin de satisfacer la demanda esperada de alimentos y forrajes. Por tanto, la agricultura debe transformarse para alimentar a la creciente población mundial y sentar las bases para el crecimiento económico y la reducción de la pobreza. El cambio climático hará más difícil esta tarea en un escenario sin cambios, debido a los impactos adversos sobre la agricultura, que requerirán esfuerzos de adaptación vertiginosos y costes asociados cada vez mayores. -
27
Nellemann C, Corcoran E, Duarte CM, Valdés L, De Young C, Fonseca L, Grimsditch G, (Eds). 2009. Blue Carbon. A Rapid Response Assessment. Nairobi, Kenya: United Nations Environment Programme; Arendal, Norway: GRID-Arendal.
http://www.grida.no/publications/rr/blue-carbon/ Carbono azul. Evaluación de Respuesta Rápida. Un nuevo informe de Evaluación de Respuesta Rápida salió el 14 de octubre de 2009 en la Conferencia de Diversitas, en el Centro de Conferencias de Ciudad del Cabo, Sudáfrica. Este informe fue elaborado por expertos de GRID-Arendal y el PNUMA, en colaboración con la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), las Comisiones Oceanográficas Internacionales de la UNESCO y otras instituciones. En él se resalta la función fundamental de los océanos y ecosistemas oceánicos para mantener nuestras condiciones climáticas. Está dirigido a ayudar a los tomadores de decisión a incorporar el tema de los océanos en iniciativas nacionales e internacionales de cambio climático.
Manejo energético
Introducción
La energía desempeña un papel crucial en cada una de las etapas del sistema agroalimentario: en la etapa de preproducción de los insumos; en la producción agrícola, pesquera, ganadera y forestal; en las operaciones de posproducción y poscosecha; en el almacenamiento y procesamiento de los alimentos; en el transporte y distribución y en la preparación de los alimentos. Dichos sistemas requieren dos tipos de energía: directa, que comprende electricidad, potencia mecánica, combustibles (sólidos, líquidos y gaseosos) y energía indirecta, que se refiere a la energía requerida para fabricar los insumos, tales como maquinaria, equipo de labranza, fertilizantes y pesticidas (FAO 2012a). 28
En las últimas décadas, el uso cada vez mayor de insumos energéticos ha contribuido de manera significativa a alimentar al mundo (FAO 2013a) 26 y actualmente el sector alimentario es responsable de alrededor del 30 % del total del consumo final de energía en el mundo (ibíd.). No obstante, tiene una alta dependencia de combustibles fósiles que potencialmente podrían ser una amenaza para la seguridad alimentaria (ibíd.). Además, se estima que la cocina y calefacción de dos quintos de la población mundial aún depende del uso energético de madera que no es cosechada de manera sostenible (Bogdanski 2012). 29 Es probable que el incremento en la producción de alimentos que se requiere para satisfacer las necesidades de una creciente población incremente el uso de energía dentro del sector. Esto potencialmente podría ampliar la brecha entre la demanda y el acceso a la energía y podría incrementar el impacto negativo de la agricultura sobre el medio ambiente, mediante el cambio en el uso de la tierra y el aumento de las emisiones. En combinación con el consumo insostenible de energía, estos factores representan desafíos significativos para el manejo energético en un contexto de ASAC. Sin embargo, el manejo eficiente de fuentes de energía y diversificación mediante el uso de energía renovable sostenible puede reducir la dependencia de combustibles fósiles, aumentar el suministro y acceso a la energía y reducir el impacto sobre el medio ambiente. Teniendo esto en cuenta, el manejo energético posee tres objetivos principales: (i) aumentar la eficiencia energética, (ii) generar un suministro de energía renovable del sector y (iii) ampliar el acceso a servicios energéticos modernos (FAO 2013a). 26
Su contribución a la ASAC
- Productividad: La producción agropecuaria se puede incrementar mediante el aumento de la eficiencia energética y la reducción de las pérdidas; una mayor diversificación energética por medio del aprovechamiento de fuentes de energía renovable y con la ampliación del acceso a fuentes de energía a través de sistemas eficientes y asequibles a pequeña escala.
- Adaptación mediante la gestión de los riesgos climáticos a corto plazo: Reducir la dependencia de energías fósiles y los costos relacionados con esta, así como la adopción de medios alternativos o más sostenibles de aprovechamiento de la biomasa (p.ej. combustibles sólidos como madera o briquetas o biocombustibles líquidos), puede significar un aumento en la disponibilidad de tiempo e ingresos que pueden utilizarse para mejorar la resiliencia a los impactos del cambio climático y reducir la vulnerabilidad de los agricultores en caso de una crisis de los precios y la escasez de recursos. Otros beneficios de la adaptación incluyen una mejor salud, desarrollo rural y mayor seguridad alimentaria.
- Mitigación: La bioenergía, la energía solar y otras energías renovables, tales como la hidroeléctrica y geotérmica, pueden reemplazar a los combustibles fósiles y otras fuentes de energía con elevadas emisiones de CO2 (p. ej. madera y carbón) y reducirlas tanto a corto como a largo plazo. El manejo energético puede ayudar a mitigar el cambio climático a través de evaluaciones del ciclo de vida de los sistemas energéticos, la identificación de recursos energéticos renovables y sostenibles, la promoción de tecnologías eficientes y que se puedan reproducir y estudio de las políticas para encontrar áreas de mejora.
Recursos clave
FAO. 2013. Climate-Smart Agriculture Sourcebook. Module 5: Sound Management of Energy for Climate-smart agriculture. Rome, Italy: Food and Agriculture Organization of the United Nations. Pp. 139-165.Manual de referencia de ASAC. Módulo 5: Manejo racional de la energía para una agricultura sostenible adaptada al clima.
http://www.fao.org/3/a-i3325e.pdf
Esta sección examina la relación entre alimento y energía en un mundo donde el clima está cambiando y la competencia por los recursos naturales aumenta. Primero, discute el tema de «alimentos energéticamente inteligentes» en el contexto de ASAC, así como las sinergias y disyuntivas entre alimentos energéticamente inteligentes y ASAC. Además, presenta posibles soluciones para una ASAC, que incluyen tecnologías para alimentos energéticamente inteligentes y ASAC, así como aspectos institucionales y de políticas para su escalamiento.
Bogdanski A. 2012. Integrated food–energy systems for climate-smart agriculture. Agriculture & Food Security 1:9.Sistemas integrados de alimentos y energía para una agricultura sostenible adaptada al clima.
http://dx.doi.org/10.1186/2048-7010-1-9
Este artículo persigue describir la única contribución de la energía para abordar algunos retos combinados asociados con la seguridad alimentaria y el cambio climático. A diferencia de la mayoría de literatura reciente, este manuscrito ve más allá de la discusión actual sobre biocombustibles líquidos para el transporte y sus impactos potenciales sobre la seguridad alimentaria. El artículo ofrece un panorama de diferentes opciones que permiten la producción conjunta de alimento y energía de manera sostenible y adaptada al clima, además de que explica cómo tales sistemas integrados de alimentos y energía (IFES, por sus siglas en inglés) pueden contribuir a mejorar la seguridad alimentaria, el acceso a la energía y la capacidad de adaptación al cambio climático. El autor parte de estudios de caso y expone los siguientes pasos necesarios para incorporar de manera eficaz los IFES a las prácticas habituales, a la vez que discute las barreras actuales que impiden la incorporación a mayor escala de sistemas tan diversos e integrados.
FAO. 2012. Energy-smart food at FAO: an overview. Rome, Italy: Food and Agriculture Organization of the United Nations.Alimentos energéticamente inteligentes en la FAO: una visión general
http://www.fao.org/docrep/015/an913e/an913e00.htm
El artículo presenta el trabajo que realizó la FAO sobre la relación entre la energía y componentes específicos de la cadena agroalimenticia. Este complementa dos publicaciones recientes, el Documento Expositivo: Alimentos energéticamente inteligentes para las personas y el clima y el Informe de Política: exposición del caso de los alimentos energéticamente inteligentes. Estas publicaciones presentan los hallazgos de un estudio realizado en 2011, encargado por la FAO, que examinaba los vínculos entre sistemas energéticos y agroalimentarios y sus implicaciones para la seguridad alimentaria y el clima. El estudio examinaba el consumo de energía a lo largo de una cadena agroalimentaria, desde el campo hasta el plato, y el potencial de los sistemas agroalimentarios para producir energía. Los hallazgos confirmaron que los sistemas agroalimentarios utilizan una gran proporción del suministro global de energía, dependen en gran medida de combustibles fósiles para lograr sus metas de producción y contribuyen a las emisiones de gases de efecto invernadero. El estudio concluyó que los sistemas agroalimentarios tendrán que convertirse en «energéticamente inteligentes» para afrontar los retos futuros en materia de alimentos y energía y recomendó establecer un programa mayor a largo plazo con múltiples socios sobre sistemas alimentarios energéticamente inteligentes, que se fundamente en tres pilares (i) mejorar la eficiencia energética de los sistemas agroalimentarios, (ii) incrementar el uso de energía renovable en estos sistemas y (iii) mejorar el acceso a servicios energéticos modernos, mediante la producción integrada de alimento y energía. En respuesta a estas recomendaciones, la FAO ha lanzado el Programa de Alimentos energéticamente inteligentes para la gente y el clima (ESF) con múltiples socios. Este artículo ilustra la manera en que la larga experiencia de trabajo de la FAO en materia de sistemas energéticos y agroalimentarios contribuye a los objetivos del Programa ESF.
Estudios de caso
Referencias
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FAO. 2012a. Energy-Smart Food at FAO: An Overview. Environment and Natural Resources Working Paper no. 53. Rome, Italy: Food and Agriculture Organization of the United Nations.
http://www.fao.org/docrep/015/an913e/an913e.pdf Alimentos energéticamente inteligentes en la FAO: una visión general. El documento presenta el trabajo que realizó la FAO sobre la relación entre la energía y componentes específicos de la cadena agroalimenticia. Este complementa dos publicaciones recientes, el Documento Expositivo: Alimentos energéticamente inteligentes para las personas y el clima y el Informe de Política: exposición del caso de los alimentos energéticamente inteligentes. Estas publicaciones presentan los hallazgos de un estudio realizado en 2011, encargado por la FAO, que examinaba los vínculos entre sistemas energéticos y agroalimentarios y sus implicaciones para la seguridad alimentaria y el clima. El estudio examinaba el consumo de energía a lo largo de una cadena agroalimentaria, desde el campo hasta el plato, y el potencial de los sistemas agroalimentarios para producir energía. Los hallazgos confirmaron que los sistemas agroalimentarios utilizan una gran proporción del suministro global de energía, dependen en gran medida de combustibles fósiles para lograr sus metas de producción y contribuyen a las emisiones de gases de efecto invernadero. El estudio concluyó que los sistemas agroalimentarios tendrán que convertirse en «energéticamente inteligentes» para afrontar los retos futuros en materia de alimentos y energía y recomendó establecer un programa mayor a largo plazo con múltiples socios sobre sistemas alimentarios energéticamente inteligentes, que se fundamente en tres pilares (i) mejorar la eficiencia energética de los sistemas agroalimentarios, (ii) incrementar el uso de energía renovable en estos sistemas y (iii) mejorar el acceso a servicios energéticos modernos, mediante la producción integrada de alimento y energía. En respuesta a estas recomendaciones, la FAO ha lanzado el Programa de Alimentos energéticamente inteligentes para la gente y el clima (ESF) con múltiples socios. Este documento ilustra la manera en que la larga experiencia de trabajo de la FAO en materia de sistemas energéticos y agroalimentarios contribuye a los objetivos del Programa ESF. -
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Bogdanski A. 2012. Integrated food–energy systems for climate-smart agriculture. Agriculture & Food Security 2012:1-9.
http://dx.doi.org/10.1186/2048-7010-1-9 Sistemas integrados de alimentos y energía para una agricultura sostenible adaptada al clima. Para poder alimentar a la población mundial en el año 2050, la producción de alimentos debe aumentar en un 70 %, principalmente, mediante el incremento de los rendimientos. Los incrementos en productividad alcanzados en el pasado se atribuyen en parte al consumo significativo de combustibles fósiles. Por lo tanto, también se espera que en el futuro aumente el consumo de energía en agricultura, lo cual aportará a las emisiones de gases de efecto invernadero. Asimismo, se estima que la cocina y calefacción de dos quintos de la población mundial aún depende del uso energético de madera que no es cosechada de manera sostenible. Los dos tipos de consumo de energía tienen repercusiones negativas para el clima y los recursos naturales. Seguir en este camino no es una opción, pues pondrá más presión sobre la ya bastante presionada base de recursos naturales y medios de vida locales, a la vez que el cambio climático está reduciendo más la resiliencia de los agroecosistemas y los pequeños agricultores. Enfoques ecosistémicos que combinen la producción de alimentos con la de energía, como la agrosilvicultura o los sistemas integrados de cultivo-ganado-biogás, podrían mitigar considerablemente estos riesgos, a la vez que brindarían alimento y energía a las poblaciones rurales y urbanas. Se necesita con urgencia una mayor comprensión e información sobre cómo cambiar el curso mediante la implementación de las prácticas descritas en este artículo. Pero la base científica de dichos sistemas integrados, la cual es esencial para brindar información a los tomadores de decisión y para asegurar el respaldo normativo, aún es relativamente escasa. Por tanto, el autor concluye que para poder analizar estos fenómenos complejos, multidisciplinarios y de gran escala se necesita de nuevas metodologías de evaluación basadas en un análisis orientado en sistemas.